
Iberia se enfrenta hoy a uno de sus principales vuelos. La aerolínea española se presenta ante la comunidad financiera en uno de los momentos más cruciales de su historia: la víspera de la fusión con British Airways. Y lo hace tras diseñar un Plan Director 2009-2011, en el que pretende obtener una rentabilidad parecida a la que logró en los tres años anteriores con una mayor bonanza económica.
Las previsiones del consenso de analistas agrupadas por la consultora FactSet prevén que el beneficio neto de Iberia durante los tres años que dura el próximo Plan Director sume en total 455 millones de euros, 30 millones más que las ganancias de la aerolínea presidida por Fernando Conte en los tres ejercicios anteriores. Si se cumplen las previsiones de los analistas -todavía no ha presentado los resultados de 2008- la compañía podría tener entre 2006 y 2008 un beneficio neto total de 422 millones de euros.
¿Y cómo va a conseguir estos resultados en un periodo de tantas turbulencias para el sector? Es lo que Iberia va a intentar explicar hoy a los analistas. A grandes rasgos, el nuevo Plan Director da cierta continuidad al anterior, aunque va a suponer un decrecimiento total de la demanda de pasajeros de entre el 1 y el 2%. En concreto, en el largo radio, que es la joya de la corona de Iberia (IBLA.MC), el tráfico crecerá un 1%. Por contra, la caída se acentuará aún más en los vuelos nacionales, con un descenso del 7% en esos tres años, y en las rutas europeas, donde se calcula que la caída sea del 5%.
Atentos a los números
Ante este decrecimiento de la actividad, Iberia no alquilará flotas externas para hacer algunas rutas. Al menos, eso es lo que ha firmado en el preacuerdo con los pilotos del Sepla. El nuevo Plan Director también dará un esbozo de lo que debe ser la renovación de la flota de largo radio de Iberia. De momento, la aerolínea española va a recibir cinco aviones A330, que serán una flota puente hasta que se decida el verdadero parque de aviones de largo recorrido, cuyas dos principales opciones son el Airbus A350 y el Boeing 787 Dreamliner.
Todo ello teniendo en cuenta que la fusión con British Airways (BAY.LO) puede cambiar este último plan, ya que el gigante aéreo británico tiene comprometido un gran pedido de aviones y puede que Iberia no tenga necesidad de recibir un pedido de estas dimensiones.
Por eso, los expertos estiman que la compañía podría dar algunas pinceladas también sobre el posible acuerdo entre ambas, después de que ayer la firma de calificación Standard & Poor's anunciase que pone en vigilancia con implicaciones negativas a la aerolínea británica, que ahora tiene un rating de "BBB-" a tan sólo un paso del bono basura, es decir, el grado más especulativo de la inversión.
Esta noticia incrementó la caída de la compañía londinense en lo que va de año. Ya se deja un 26%, con lo que tiene una capitalización de 1.636 millones de euros, frente a los 1.763 millones a los que cotiza Iberia . "Este recorte puede perjudicar los intereses de la española, ya que si finalmente no se hace un canje entre iguales puede que no se realice la fusión y en momentos actuales creo que es necesario para sobrevivir en un sector así", afirma Bettina Gallego, gestora de renta variable de Inversis Banco.
Cubierta ante imprevistos
Sin embargo, los expertos aseguran que la compañía también podría adelantar alguna cifra sobre sus resultados de 2008. "Hay interés por ver el adelanto de cifras del cuarto trimestre y comprobar si como apuesta la gente está o no en pérdidas a nivel operativo. Las empresas aprovechan estas presentaciones para dar cifras al mercado, enfocadas a la estrategia del grupo, rutas, aprovechamiento de las mismas...", comenta Alberto Roldán, director de análisis de Inverseguros.
En este mismo sentido se posiciona Sara Herrando, analista de Norbolsa, que espera un descenso de la cifra de ventas de en torno al 1,3% respecto del año anterior. "En costes, seguimos esperando descensos -sin tener en cuenta el crudo-, tal como se venía registrando en el acumulado a septiembre del año pasado. En cualquier caso, el aumento de la factura de combustible (40% en el año), implicará un beneficio de explotación negativo", explica este analista.
Y es que los analistas comentan que Iberia es una de las compañías más certeras en su política de cobertura frente a las materias primas. La empresa tiene cubiertas el 50% de sus necesidades de fuel para 2009, a precios superiores a los 75 dólares por barril, lo que permite estar cubierto ante un entorno negativo de mercado, como el que se sufrió en la primera parte de 2008.
Por ahora, el consenso de mercado calcula que la aerolínea podría tener un beneficio neto de 36 millones de euros, frente a los 328 millones de euros que obtuvo en 2007 gracias a extraordinarios.