
El servicio postal de EEUU (USPS, por sus siglas en inglés) ha dado un primer paso hacia el futuro. El departamento ha contratado a la compañía TuSimple para el uso de camiones autónomos, de cara a una primera prueba de vehículos autoconducidos de reparto.
Así, se harán cinco viajes para recorrer más de 1.600 kilómetros (1.000 millas) a través de carreteras interestatales que unen los centros de distribución de Phoenix (Arizona) y Dallas (Texas).
Pese a que durante la prueba los vehículos no deberían contar con la intervención humana, irán a bordo un ingeniero de seguridad y un conductor, para evitar accidentes en caso de que los camiones fallasen.
Está previsto que cada camión circule durante 22 horas, incluyendo por la noche. De esta forma, TuSimple encuentra la oportunidad de validar sus sistemas y "agilizar el desarrollo tecnológico y el avance de su comercialización", según ha asegurado el fundador y presidente de la compañía, Xiaodi Hou.
El uso de camiones autónomos en el medio plazo podría revitalizar una industria estancada por la escasez de trabajadores. De seguir la actual tendencia, en el año 2024 podría alcanzarse una escasez de mano de obra en el sector de 175.000 trabajadores, según la Asociación de Camiones Americanos.
La primera pretensión de esta tecnología aplicada al mundo del correo y la paquetería es que los largos trayectos que exige un país con tanta extensión como EEUU se hagan mediante la conducción autónoma, y los pilotos humanos puedan hacer los últimos kilómetros, evitando que sea necesario contratar a dos conductores que se turnen al volante.
Robot al volante
En esta línea, se plantea también el "problema de los últimos 15 metros", consistente en la entrega a domicilio de los paquetes. Si el camión se conduce solo hasta la puerta del remitente, falta encontrar la solución para realizar la entrega.
En este sentido, Ford está probando Digit, un androide que puede soportar una carga de unos 20 kilos y un torso con cámara incrustada. Digit, creado por Agility Robotics, viajaría en los propios vehículos autónomos de entrega, compactándose en forma de cubo para ocupar menos espacio, y se deslizará en un cajón que sirve como estación de acoplamiento.