La prorroga del Brexit hasta octubre ha animado a Aena a revisar al alza su previsión de tráfico de pasajeros para 2019, lo que implicará una mejora de los ingresos.
El gestor tiene ahora una mayor visibilidad sobre cómo se va a comportar el verano debido a que una de las principales amenazas se han mitigado por lo que prevé que el tránsito de viajeros crezca un 3,7 por ciento este año hasta los 273,5 millones de pasajeros frente al aumento 2% previsto inicialmente. "Revisa su previsión de tráfico de pasajeros para el año 2019 y estima su crecimiento en la red de aeropuertos gestionados por Aena en España en un 3,7%. Esta estimación se considera que podrá variar en un entorno de 0,5"", explica la compañía en un Hecho Relevantes comunicado a la CNMV.
Pese a la mejora, aun así parece un dato conservador ya que se llegó a hablar de que podía mejorar hasta un 5 por ciento. No en vano, en el primer trimestre del año pasaron 52,8 millones de viajeros por la red de aeropuertos de Aena, lo que supone un 5,9% más que en el mismo periodo del año pasado. A su vez, la Semana Santa ha tenido un buen comportamiento y las aerolíneas han programado 217 millones de asientos para esta temporada de verano (abril-octubre), lo que supone un alza del 6,2%. Despejar las dudas sobre el impacto de un posible Brexit duro en verano ha sido fundamental para animar al gestor subir sus estimaciones de tráfico ya que los británicos son los principales turistas de España y un desplome de su demanda afectaría de lleno al turismo y la operativa de los aeródromos.
Durante la Junta de Accionistas de Aena, Mauri Lucena señaló otra serie de riesgos a corto plazo que pueden afectar de lleno a la firma. "El incremento de actividad de destinos geográficos competidores de España, el proceso de concentración de las aerolíneas o el mayor grado de exigencia de los pasajeros restan visibilidad a la actividad de la compañía", explica.
