
El Gobierno aprobó este viernes la hoja de ruta energética hasta 2030. El Ejecutivo presentó tres documentos: el Anteproyecto de Ley de cambio climático, el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) y la Estrategia de transición justa con el objetivo de descarbonizar la economía.
Según explicaron fuentes del ministerio de Transición Ecológica, el Gobierno ha impuesto un objetivo de reducción de emisiones del 35% en el borrador de la Ley con intención de que pueda cumplirse, aunque la ambición del Plan que se ha remitido ya a Bruselas -el último de los 28- será mayor con una reducción del 42% en la energía final.
Las inversiones totales del PNIEC alcanzarán los 236.124 millones que se reparten entre ahorro y eficiencia (37%/ 88.476 millones), renovables (42%/ 101.636 millones), redes y electrificación (18%/ 36.649 millones) y resto de medidas (3%/6.166 millones). De esta cantidad, la inversión privada asciende a 188.302 millones (80%) y la pública a 47.822 millones (20%).
Reducción de la factura
El conjunto de medidas propuestas por el Ejecutivo permitirá una rebaja estimada de la factura eléctrica del 12% antes de impuestos. La previsión es que, a partir de ese año, el precio descienda por la entrada masiva de renovables, al ser tecnologías más baratas y competitivas, y se pase de un ahorro de 5.200 millones en 2025 a 12.500 millones en 2030.
El Gobierno además explicó que el Ministerio de Hacienda está trabajando ya en una reforma de la fiscalidad ambiental que en general no ha sido tenida en cuenta en la elaboración de este paquete. Este procedimiento se enmarca también en la revisión que ha abierto la Comisión Europea para acometer una reforma de los impuestos de modo que se pueda incluir al CO2 como uno de los elementos a tener en cuenta a la hora de imponer gravámenes.
En lo que respecta a los impuestos, el plan considera que se reducirán los ingresos correspondientes a la energía pero se verán compensados por los que aportan renta, patrimonio y capital que aumentarán entre 4.100 millones y 11.300 millones y las contribuciones a la Seguridad Social que crecerán entre 2.900 y 6.000 millones.
La tasa de paro se reducirá entre un 1,1% y un 1,6% al crearse entre 250.000 y 364.000 empleos. De ellos, hasta 182.000 empleos corresponderán a las renovables, 80.000 empleos a la eficiencia, 44.000 empleos a las redes y electrificación. Por contra, el informe económico calcula que se incrementan los gastos de las administraciones públicas en 3.700 millones de euros.
Según el estudio de evaluación de impacto, el PIB aumentaría entre 19.300 y 25.100 millones de euros año a lo largo de un década, lo que representa un aumento del 1,8% en 2030 y supondrá un ahorro del orden de 75.300 millones para la balanza comercial en compras de hidrocarburos.
Efectos saludables
Por otro lado, el plan que acaba de presentar el Gobierno permitirá salvar 2.222 vidas respecto al escenario previsible en la actualidad, lo que implica pasar de 8.951 a 6.729 muertes prematuras.
Según los cálculos realizados, los daños de la contaminación atmosférica en la salud alcanzan los 51.591 millones de euros, mientras que como resultado del PNIEC se reducirán hasta los 38.784 millones, es decir, un co-beneficio de 12.807 millones
El Ministerio de Transición Ecológica prepara también una profunda reforma del actual bono social de modo que acabe convertido en un sistema que sea más simple y accesible para los beneficiarios. El Ejecutivo espera sacar a consulta pública un nuevo documento en los próximos días con la intención de poder aprobarlo en marzo. Además el ministerio no se pronunció este viernes sobre una posible extensión de la rebaja del impuesto a la generación del 7% durante tres meses más, pero el sector prácticamente da por descontado que se va a prolongar en un escenario de elecciones.
La revisión que ha realizado el Gobierno, con la ayuda del Basque Centre for Climate Change, calcula que los hogares vulnerables aumentará en 2030 su gasto un 2,2% y los no vulnerables un 1,3%, lo que indica que se benefician los colectivos de menor renta.
La generación eléctrica prevista para 2030 es de 337.448 GWh de las que las principales aportaciones corresponderán a la eólica (116.110 GWh), la fotovoltaica (66.373 GWh), la hidráulica (29.045 GWh), la nuclear (24.800 Gwh), los ciclos combinados (34.922 GWh) por lo que no será necesario un respaldo adicional de centrales de gas para cubrir los periodos de baja generación con energía verde.
El sector eléctrico representará el 70% de la reducción de las emisiones en el periodo.
El Ejecutivo continúa además con los trabajos de su agenda climática con la preparación de la Estrategia de Bajas Emisiones a Largo Plazo 2050, que ha de ser enviada a la Comisión Europea antes de que acabe 2019.
Control de las emisiones en las leyes
El Gobierno obligará a partir de ahora a justificar en las memorias económicas de la normativa que prepare así como en los Presupuestos Generales del Estado el impacto ambiental en emisiones que tengan dichas medidas, de modo que haya una mayor concienciación a la hora de tomar decisiones administrativas sobre cualquier asunto. Desde hace años se realiza un análisis similar, por ejemplo, sobre la igual de género de cada medida que prepara los distintos departamentos ministeriales.