
Acciona y CAF han conseguido el apoyo financiero del Gobierno de España para dar la batalla por un contrato para ampliar el metro de Ottawa, en Canadá.
El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo concederá un préstamo de hasta 19 millones de dólares canadienses (12,5 millones de euros) a los dos grupos españoles en el caso de que el consorcio en el que participan sea adjudicatario del proyecto, por el que se encuentra entre los tres finalistas. El consejo de ministros dio su autorización el pasado viernes para la concesión de este crédito reembolsable con cargo al Fondo para la Internacionalización de la Empresa (FIEM).
El proyecto en cuestión es la ampliación de la línea Trillium del metro de la capital de Canadá, así como la provisión de nuevo material rodante. La inversión estimadas se sitúa en los 535 millones de dólares canadienses (unos 350 millones de euros). Acciona y CAF se han unido a la constructora local Thomas Cavanagh y la firma de inversión Fengate, entre otros. Compiten en la puja final con las propuestas presentadas por la alianza formada por Plenary, RW Tomlinson, Colas and WSP, por un lado, y por la multinacional canadiense SNC Lavalin, por otro.
El proyecto tiene por finalidad el diseño, construcción, rehabilitación y mantenimiento de una extensión de ocho kilómetros hacia el sur de una línea existente de diésel (Existing Trillium Line), con dos ramales adicionales de cuatro kilómetros cada uno.
Además, comprende la integración de una flota mixta entre vehículos existentes y vehículos nuevos, que conjuntamente operen en la infraestructura ampliada. Los vehículos existentes serán modernizados y adaptados a la nueva infraestructura para garantizar la operatividad del sistema. Esta parte del contrato le corresponderá al fabricante de material rodante vasco.
La responsabilidad del mantenimiento, por una sociedad española
Una vez finalizado el proyecto, la responsabilidad del mantenimiento de todo el sistema (incluyendo infraestructura y vehículos) será transferida a una sociedad concesionaria del mantenimiento, participada al 100% por socios españoles.
En la lucha por este contrato se hallaban inicialmente otras dos constructoras españolas, ACS y Sacyr, pero no lograron pasar el corte final.
En el metro de Ottawa hay otros proyectos de ampliación en ciernes con intereses de firmas españolas. Es el caso de la extensión de una línea de este a oeste cuyo presupuesto se eleva a cerca de 1.600 millones y para el que Ferrovial también es uno de los tres finalistas.