
Goldman Sachs cayó un 7,5% hasta los 205,95 dólares, mayor que la caída de junio de 2016 tras la celebración del referéndum sobre el Brexit, después de admitir su papel en el escándalo del fondo 1MDB en Malasia. El Gobierno exige la devolución completa de los honorarios que recibió por organizar dicho fondo, que ascienden a 600 millones de dólares.
Goldman ha admitido su culpabilidad en el escándalo del fondo, después de que su exbanquero Tim Leissner se declarase culpable por su papel. La investigación se inició hace años, para tratar de dilucidar el papel ejercido en la recaudación de 6.500 millones para el fondo y las comisiones cobradas entonces.
La anterior mayor caída se remonta al 9 de noviembre de 2011, cuando cerró en 99 dólares tras perder un 8,2%.
1MDB provocó un escándalo mundial por malversación de fondos y lavado de dinero, provocando investigaciones en Estados Unidos, Singapur, Suiza y otros países, según recoge Bloomberg.
El escándalo llevó al partido histórico de Gobierno de Malasia a perder las elecciones por primera vez desde la independencia del país. Tras llevar a la oposición al poder, el nuevo primer ministro, Mahathir Mohamad, prometió investigar a fondo el escándalo. La pesquisa ya ha llevado a prisión a su predecesor, Najib Razak, acusado de embolsarse 700 millones de dólares.
La actuación bursátil de Goldman Sachs arrastró al resto de la banca. Así, Morgan Stanley cayó un 3,5%, Bank of America un 2,7% y JP Morgan un 2,1%.