
La flota de coches de Uber y Cabify se ha incrementado en plena sublevación del taxi. Con los vehículos de los taxistas bloqueando las principales avenidas de Madrid, Barcelona, Málaga, Valencia o Sevilla, las Comunidades Autónomas (CCAA) han puesto en circulación unas 1.365 licencias VTC más, lo que ha elevado un 14% el número de vehículos que operan con estas plataformas en solo un mes.
Según los datos publicados por el Ministerio de Fomento, agosto ha arrancado con 10.731 autorizaciones para el transporte de viajeros en turismos de alquiler con conductor frente a los 9.366 que había disponibles a principios de julio. Así, la ratio entre VTC y taxis se ha reducido un poco más, hasta el 1/6.
Pese a esta oleada de autorizaciones, cuya liberación se ha acelerado en los últimos meses, la llegada de nuevos títulos está lejos de tocar a su fin ya que, a falta de conocer los datos de Andalucía, las principales autonomías ya están obligadas por sentencia judicial a entregar unas 6.300 más en los próximos meses. La cuestión está en que algunas CCAA hacen lo que está en su mano para ralentizar la puesta en circulación de nuevas licencias de VTC reduciendo el personal o retrasando el tiempo los trámites.
Así, mientras que entre enero de 2017 y enero de 2018 la flota de Uber y Cabify apenas sumó 1.236 vehículos nuevos, entre el 1 de enero y el 1 de agosto de 2018 se han liberado 4.020 licencias de VTC nuevas, más del triple que en todo el año pasado, lo que ha llevado a que el número de coches con licencia para transportar pasajeros vía precontratación crezca un 58% en lo que va de año, mientras el descontento del gremio del taxi crece a pasos agigantados. En este punto, fuentes del sector explican que no todos los coches están actualmente circulando ya que algunos deben estar pendientes de contrato con las plataformas o aparcados.
La gran movilización del taxi que llevó al Ministerio de Fomento a comprometerse a "aprobar en septiembre un Real Decreto Ley que permitiera tender a recuperar la ratio 1/30" arrancó en Barcelona de la mano de Elite Taxi después de que el Tribunal Superior de Justicia suspendiera cautelarmente el reglamento antiUber de Ada Colau. Y es que, los taxistas de la Ciudad Condal están especialmente preocupados porque tras un año 2017 sin apenas crecer, el número de licencias VTC en Barcelona se ha elevado hasta 1.830. En enero de 2018 en toda Cataluña había 877. La proliferación de este tipo de títulos permitió, entre otras cosas, que Uber volviera a operar en la Ciudad Condal gracias a la puesta en marcha de más de 100 licencias de Alsa.
Pese al rápido crecimiento de Uber y Cabify en la capital de Cataluña, la región ha sido la segunda que más ha visto crecer la flota de VTC. Y es que, como viene siendo habitual, Madrid ha liderado la liberación de autorizaciones al entregar 647 más en apenas 30 días. El resultado es que la capital de España ha iniciado agosto con unas 4.955 licencias de VTC y una ratio 1/3 que se reduce a 1/1,5 los fines de semanas, cuando está prohibido que circule la mitad de la flota de taxis.
La tercera Comunidad que más títulos ha liberado ha sido Andalucía, con 232 más hasta los 1.710 y una ratio de 1/5,2, muy lejana del 1/30 reclamado por taxistas. Así, el verdadero conflicto entre los taxistas y los coches de Uber y Cabify actualmente se concentra en tres provincias: Barcelona, Málaga y Madrid, que tienen el 73% de las licencias que hay ahora mismo en circulación, aunque los taxistas dicen que van coches de otras CCAA a trabajar en esas ciudades. No en vano, la ley permite a las VTC obtener el 20% de su facturación fuera del territorio en el que están adscritas.
Cristaliza la tensión entre los taxistas y Uber y Cabify
Un ejemplo de la tensión que se vive en el gremio lo ofreció la semana pasada el coordinador de la nueva Comisión del Taxi Málaga, Jesús Báez, que en una entrevista con la Opinión de Málaga, advirtió a Uber y Cabify de que no entraran al Real de la Feria por "seguridad". La situación en Málaga y la presión sobre las autoridades locales se ha complicado de tal forma que los conductores de VTC tienen prohibido entrar al recinto a recoger clientes al no ser considerados "transporte público".
Pese a que el problema está lejos de solucionarse y al difícil encaje legal de algunas de la propuestas, las asociaciones de taxistas han decidido desconvocar los paros hasta septiembre para dar tiempo al Ministerio que dirige José Luis Ábalos a desarrollar, junto a las Comunidades Autónomos, el plan "encaminado a hacer efectiva la ratio 1/30 en las calles".
Es decir, a poner negro sobre blanco las medidas que habiliten a los ayuntamiento a sacar de las ciudades los más de 8.850 vehículos de Uber y Cabify que actualmente compiten con los taxistas y que hacen que la ratio, que se incumple sistemáticamente desde al menos 2014, se reduzca cada vez más.