
Cabify avanza en su negocio paralelo de crear empresas para llenarlas de licencias VTC (vehículos de turismo con conductor) y vendérselas a terceros en plena ofensiva del Gobierno y los Ayuntamientos para tratar de frenar el negocio.
En lo que va de año, la plataforma online ha reforzado su red de empresas y ha más que triplicado su flota de coches con la matriculación de unos 488 vehículos en Madrid y Barcelona, hasta llegar a los 687. Según consta en el Registro Mercantil, Maxi Mobility Spain, la dueña de Cabify, es a su vez accionista de Vector Ronda Teleport, que sólo entre febrero y marzo de 2018 sumó 101 coches a su flota de VTC.
Este mismo año, el empresario Rosauro Varo, conocido popularmente por ser el novio de Amaia Salamanca, entró en el capital de firma fundada por Cabify en 2015 con el objetivo de inyectar fondos y acelerar la formación de una gran flotas de vehículos que operaran a través de la plataforma.
Con esta estrategia, la compañía que dirige Mariano Silveyra se asegura tener suficientes vehículos a su disposición para satisfacer la creciente demanda y plantar cara a Uber ya que una de las condiciones para operar con ellos es que no se firme con la norteamericana.
Desde que Varo fue nombrado vicepresidente de Ronda Vector Teleport en enero y de que Juan Ignacio Braschi, director financiero de Cabify y apoderado de Maxi Mobility Spain, pasara a ser el consejero delegado de la misma, se han realizado cuatro ampliaciones de capital por 2,3 millones para potenciar el crecimiento.
Así, además de las licencias vinculadas a la propia compañía, Vector Ronda Teleport ha reforzado la red de empresas que controla. En lo que va de año ha sumado a su red Forever Tours Dreams, de la que Braschi es administrador único, y a través de la cual ha matriculado 275 vehículos solo entre marzo y mayo.
También ha empezado a operar Arrendamiento de Vehículos con conductor Barcelona 2017 SA, que sumó 30 coches en los últimos meses, y Auto Andalucía Madrid y Mojalmi que todavía no tienen vehículos, tal y como consta en el registro de Fomento. Todas tienen en común que Braschi es su administrador único.
Igual que el de varias compañías que comparten el nombre Global y el objeto social, transporte de personas, y que han sido creadas bajo el paraguas de Vector Ronda este año. Esta red de firmas, de la que también forma parte Cab Car Madrid, con 132 licencias, de las cuales 82 se matricularon este año, viene a sustituir a las Yirmi creadas en 2015 para acumular licencias y que han sido vendidas.
Algunas informaciones apuntan a que Varo tiene unas 1.000 licencias VTC y que Cabify lleva años pidiendo miles, pero éstas no empiezan a contar para la Administración hasta que no se activan, es decir, hasta que no se vinculan a un coche.
Una de las operaciones más sonadas de Cabify se cerró el año pasado cuando vendió a varios inversores, entre los que se encuentran Jaime Castellanos y Jon Riberos y Rafael García Tapias, Yirmi UC Fiesta Omnibus con unas 78 VTC. Poco después, los nuevos dueños rebautizaron la firma como Moove Cars Sustaintable y le inyectaron fondos con el objetivo de crear la mayor flota de VTC de España. Según el Registro Mercantil, la firma participa en varias compañías como Your Cab, Move Me Mad, Cartravel Spain o Don Planet que han matriculado varios este año. A su vez, García Tapia, consejero delegado de Moove, tiene cargos en otras 178 firmas del sector, entre las que se encuentra Tibus. La empresa es al 60 por ciento propiedad de Alsa, que es la que ha aportado las 125 licencias de Barcelona. El personal y los vehículos los gestiona Moove Car y operan con Uber.
Este diario se ha puesto en contacto con Cabify para contar con su opinión pero sólo han querido recalcar que son una plataforma constituida como una agencia de viajes que intermedia entre el vehículo y el cliente.