"Unidad y futuro". Son los dos compromisos que asumió el viernes el nuevo presidente ejecutivo de El Corte Inglés, Jesús Nuño de la Rosa, durante su visita al centro comercial del Paseo de la Castellana, en Madrid. De la Rosa, que estuvo acompañado por el consejero delegado, Víctor del Pozo y el director de Ventas, Arsernio de la Vega, se había reunido previamente con parte de la cúpula de la compañía, los directores territoriales y los representantes de los sindicatos Fasga, Fetico, CCOO y UGT, que agradecieron el gesto y le mostraron su apoyo. A todos ellos les transmitió la misma idea, insistiendo en una apuesta por la transparencia y pidiéndoles "confianza".
En la carta remitida a la plantilla el pasado jueves por la noche Nuño de la Rosa admitía que el reto "no va a ser fácil", por lo que pedía trabajar duro. "Comenzamos una nueva etapa ilusionante en la que te pido que mantengas el esfuerzo y la profesionalidad que nos reconocen los clientes para ser mejores en nuestro trabajo", aseguraba. La primera decisión que ha adoptado al frente de la compañía ha sido convocar un consejo de administración el próximo 27 de junio y aunque todavía no se conocen los puntos del orden del día, según las fuentes consultadas, servirá para que además de exponer sus planes de futuro al máximo órgano ejecutivo, se pueda anular la convocatoria de una reunión extraordinaria realizada por Dimas Gimeno para el 12 de julio.
Un consejo en entredicho
En el orden del día de esta reunión, Gimeno querría estudiar la creación de una comisión de nombramientos y retribuciones, además de analizar la salida a bolsa y las presuntas irregularidades que, según él, existían en algunas divisiones de la compañía, fundamentalmente en el área de seguridad. El problema es que todas esas peticiones están fuera de su alcance al no tener ya ninguna función ejecutiva desde el pasado mes de octubre, tal y como le recordaron el resto de consejeros de forma unánime el 30 de mayo tras aprobar las cuentas.
Frente a la petición de unidad del nuevo presidente de El Corte Inglés su antecesor en el cargo insiste en amenazar al resto de miembros del consejo. De hecho, el jueves les remitió una carta advirtiéndoles de "las consecuencias indeseadas para todos", si se aprobaban "acuerdos nulos de pleno derecho", en referencia a su destitución.
Dimas Gimeno, cuya gestión ha sido muy criticada por prácticamente todos los accionistas al no haber cumplido los objetivos previstos, califica ahora de "lamentable" que "El Corte Inglés se mueva al dictado de determinadas personas que carecen de experiencia empresarial y de dirección".
El hasta ahora presidente se marcha sin finiquito -podría presentar antes de 20 días una demanda en un juzgado de lo social- y prepara ya una batería legal contra su antigua compañía. Además de impugnar el consejo, al entender que su constitución no ha sido válida, está estudiando también acciones de responsabilidad social contra algunos de los miembros del máximo órgano ejecutivo, a los que acusa de amparar irregularidades en la compañía.
De la Mata dirigirá Viajes
Más allá de la batalla legal, que no ha hecho, por lo tanto, nada más que empezar, El Corte Inglés empieza a pensar ya en el futuro y a tomar decisiones. De momento, Miguel Ángel de la Mata, número dos de Nuño de la Rosa al frente de la filial de Viajes, asumirá el mando de esta empresa. Y el nuevo presidente empieza ya a trabajar en la próxima emisión de bonos por valor de 1.200 millones de euros, que se llevará a cabo previsiblemente después del verano.
Conviene recordar que el nuevo presidente fue el principal responsable de haber logrado el pasado mes de enero cerrar el acuerdo de refinanciación con la banca acreedora por un importe de 3.650 millones de euros. En el horizonte queda, asimismo, la salida a bolsa de la compañía, que está comprometida por contrato con el inversor catarí Al Thani, pero que no se tiene que llevar a cabo hasta dentro de dos años. De la Rosa trabajará, por ello, en ir preparando la empresa para el posible salto futuro al mercado.