
Igor Albiol, director general de Telepizza desde el año 2010 y máximo responsable financiero de la misma, abandona la compañía por discrepancias con la alianza firmada con Pizza Hut, según han confirmado fuentes de toda solvencia próximas al grupo. El directivo, con el que este periódico intentó contactar sin éxito, se suma así a Marcos de Quinto, exvicepresidente mundial de Coca-Cola, que dimitió también como consejero de la cadena española al considerar que el acuerdo no era bueno para la firma y que en realidad Pizza Hut debería haber lanzado una opa, según declaró el martes en una entrevista con el diario El Mundo.
Albiol asumió el cargo de director general en el marco de una reorganización del organigrama de la empresa en 2010 tras la entrada de Pablo Juantegui como consejero delegado y tras haber ocupar distintas responsabilidades en el área financiera. Considerado el número dos de la empresa -tenía bajo su cargo el control de gestión, las finanzas y el área legal de Telepizza- mostró desde el primer momento sus discrepancias ante el acuerdo firmado con Yum!, el gigante norteamericano propietario de Pizza Hut.
La compañía ha nombrado en su lugar a Javier Van Engelen, hasta ahora director financiero global de la cadena de distribución portuguesa Jeronimo Martins, que ha trabajado también en multinacionales como Astra Zeneca o Procter & Gamble, y que tendrá el cargo de vicepresidente ejecutivo.
La operación
Tras un año de negociaciones, Telepizza anunció el pasado 16 de mayo que había logrado cerrar el contrato más importante de su historia al unirse a la mayor cadena de pizzerías del mundo, con más de 17.000 restaurantes, para la gestión y el desarrollo de su marca en Latinoamérica (a excepción de Brasil), la región del Caribe, España, Portugal y Suiza. Telepizza se hizo cargo así de un total de 1.000 locales de Pizza Hut, aportando por su parte casi 1.500 más, que operaban hasta ahora bajo su marca.
Juantegui explicó en ese momento que "Telepizza pasa de tener 1.600 a 2.560 restaurantes en todo el mundo y presencia en 37 países, frente a los 23 en los que estamos actualmente, duplicando las ventas, desde 562 millones a 1.100 millones de euros".
El problema de fondo es que la operación está sujeta a numerosas cláusulas, con severas penalizaciones en el caso de que no se cumplan los objetivos previstos, estableciéndose incluso que Telepizza podría llegar a perder todas las masterfranquicias y quedarse finalmente sin nada, ya que también cederá su propia enseña.
De momento, tendrá que abonar una tasa de entrada por los derechos en exclusiva de 11,85 millones de euros, además de un canon del 3,5% sobre las tiendas propias y franquiciadas de Pizza Hut y de un porcentaje similar por las suyas. Como única compensación conservará 2,5 puntos del 6% del canon a sus franquiciados. La alianza con Pizza Hut fue aprobada de forma unánime por el consejo de administración, pero según las fuentes consultadas por este periódico, la votación se repitió tras la salida de Marcos de Quinto, que desde el primer momento rechazó el acuerdo.
Los franquiciados
Ni el exvicepresidente de Coca-Cola y antiguo presidente de la filial española ni Igor Albiol son, en cualquier caso, los únicos que han rechazado la operación. La Asociación de Franquiciados de Telepizza ha mantenido también "no acertamos a entender cómo este acuerdo puede llegar a ser beneficioso para Telepizza, los empleados o para la red de franquicias".
Esta asociación, que asegura representar a casi el 70% de las tiendas de la compañía, todas las franquiciadas, presentó ya una denuncia contra la operación ante la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) teniendo en cuenta que Telepizza asume también la gestión de Pizza Hut en España y Portugal. Los franquiciados entienden que el acuerdo con su mayor competidor, "afectará directamente a los compromisos con los asociados, que resultarían incumplidos". A pesar de todo, la operación ha sido muy bien recibida en el mercado y Telepizza se ha revalorizado un 8,5% en bolsa desde que se anunció el acuerdo, cerrando el martes a 5,84 euros por acción. Subió otro un 0,69%.
Tan solo una semana después de anunciarse la operación, el fondo de capital riesgo KKR se reforzó como máximo accionista de la empresa tras alcanzar una participación del 26,31%. KKR se hizo, en concreto, con un 6% adicional del capital, valorado en ese momento en alrededor de 36 millones de euros. En principio, parece descartado que vaya a comprar más o lanzar una opa.