
La inversión en capital privado mantiene el ritmo y ha arrancado con fuerza el año. De enero a marzo, el volumen ascendió a 918 millones de euros, un 9,7% más que en el mismo periodo del año anterior. El mayor volumen ha venido de la mano de los inversores de mid-market (operaciones de entre 10 millones y 100 millones) -tanto por fondos nacionales como internacionales-, que han protagonizado 35 transacciones.
En palabras del nuevo presidente de la patronal (Ascri) y socio de Altamar, Miguel Zurita, "el año ha empezado con optimismo". "Somos un sector que aporta liquidez a las firmas no cotizadas facilitando su internacionalización, creando empleo y generando buenos retornos a los inversores". La vicepresidencia se reparte entre Beatriz González, fundadora de Seaya Ventures, y Juan Leach, socio de Miura.
El nuevo presidente de Ascri -en sustitución de Juan Luis Ramírez, socio fundador de Portobello, que deja su cargo tras cuatro años en la junta directiva- apuntó también que, desde 2000, el sector ha invertido más de 46.000 millones en más de 5.310 empresas españolas.
Dinamizador de la economía
En esta misma línea, el presidente del ICO, Pablo Zalba, destacó el importante papel del negocio del capital privado como dinamizador de la economía española y confió en que las cifras de inversión "vayan a más para que lleguen a más pymes españolas". También recordó que el sector todavía tiene mucho camino por recorrer, ya que solo representa el 0,34% del PIB español, frente al 0,5% de Francia o 0,53% de Holanda.
En este sentido, Zalba anunció la ampliación en 500 millones del Fond-ICO Global, la iniciativa estatal que inyecta dinero público en los fondos para que ganen tamaño y llegue más inversión a la economía real. De hecho, en la última convocatoria -que se resolverá en los próximos días- se ha batido récord de participación con 29 fondos, de los que un 55% son internacionales, lo que demuestra el apetito inversor por el mercado español. Por otro lado, el presidente de Cofides, Salvador Marín, anunció que MCH será el encargado de gestionar el vehículo de 200 millones de inversión conjunta con Omán, tal y como adelantó elEconomista.