El gigante británico Intu, dueño en España de centros comerciales como el madrileño Xanadú o Puerto Venecia, en Zaragoza, sigue creciendo en nuestro país con una nueva sede en la capital. La compañía, que hasta ahora tenía sus oficinas en el Barrio de Chamberí, se muda a un palacete en pleno Paseo de la Castellana.
Con esta operación, que ha sido asesorada por la consultora inmobiliaria Savills Aguirre Newman, la firma amplía su espacio y se posiciona en un enclave estratégico en la ciudad. Concretamente, Intu se instalará en el número 64, en el emblemático Palacete Moreno Benítez, que cuenta con 1.350 metros cuadrados repartidos en cinco plantas.
El edificio, construido en 1904 por el arquitecto Joaquín Saldaña, fue habitado durante años por la aristocracia de la época y es uno de los palacetes que han logrado sobrevivir entre los 70 que dominaban este gran eje madrileño.
Su propietario actual, que se convierte con este contrato en el casero de Intu en Madrid, es la sociedad patrimonial Caboel, participada por las familias Carbó, Bonet y Elías, antiguos propietarios del grupo de distribución Caprabo.
Caboel se hizo con el inmueble en 2015 al hacer la mejor oferta -13,5 millones de euros- en una subasta pública organizada por la Sociedad Estatal de Gestión Inmobiliaria de Patrimonio (Segipsa). Hasta ese momento, el edificio estaba en manos de la Administración General del Estado, que lo adquirió en el año 1982.
La sociedad ha llevado a cabo un proyecto de reforma del edificio para después obtener rentabilidad mediante el alquiler del mismo.
Caboel cuenta con 30.000 metros cuadrados de oficinas en Madrid, Barcelona, Lisboa y Oporto, según aparece en su página web. La cartera de la sociedad se compone de 150 activos, diversificados en distintos sectores como el comercial, con locales y parques de medianas, el hotelero y el logístico.
