Bruselas, 19 oct (EFECOM).- La Unión Europea (UE) aplica desde hoy medidas de salvaguarda o "anti-dumping" (contra la competencia desleal) a las importaciones de fresas congeladas, procedentes de China, en reacción a las quejas de varias industrias europeas.
Los envíos a la UE de fresas congeladas o cocinadas procedentes de China estarán gravados, durante un período de seis meses, con aranceles del 34%, que para algunas empresas chinas serán inferiores, según una decisión de la Comisión Europea (CE), que entra en vigor hoy.
Ese arancel se unirá a los gravámenes actuales para las importaciones chinas, del 14,4%, según explicaron fuentes del sector.
Bruselas impone estas medidas tras investigar sobre las quejas de los comercializadores de fresa congelada, procedentes de Polonia, quienes denunciaron daños por la competencia desleal que suponían las importaciones de fresas congeladas del país asiático.
En la UE, Polonia y España son los países principales donde se producen fresas congeladas y las empresas polacas que iniciaron el caso representan aproximadamente un 25% del sector.
La Comisión concluyó que las importaciones chinas han causado daños al sector y que eran necesarias medidas provisionales para evitar que los productores europeos siguieran sufriendo pérdidas.
Las medidas entran en vigor tras haber sido publicadas en el Diario Oficial de la UE (DOCE)
La asociación que agrupa a las industrias de frutas y hortalizas transformadas europeas (OEIFL) lamentó, en un comunicado, la imposición de aranceles a las fresas congeladas de China, porque incrementará los costes de las materias primas para las industrias que fabrican alimentos, como por ejemplo, la mermelada.
La OEIFL -en la que están integradas las asociaciones españolas de conservas FNACV y ASEVEC- manifestó que las medidas contra el producto chino se aplican en un año "particularmente difícil" por la escasa oferta y los precios, excepcionalmente altos.
Esta organización criticó que sólo el 30% de los productores de fresa congelada solicitaran las medidas "anti-dumping", mientras que el 70% restante, entre los que cita los españolas, "no consideró que mereciera la pena unirse a la queja".
Añadió que la importación de China no es el factor principal que perjudicó la rentabilidad del sector polaco y que Polonia "nunca ha podido abastecer más del 70% de las necesidades de la industria". EFECOM
ms/jj