
Grupo Godó se desinfla en plena ofensiva soberanista a pesar del elevado gasto en publicidad institucional y subvenciones que ha realizado la Generalitat en los últimos años. Solo en 2015 y 2016, después de la primera consulta del 9-N, el Govern repartió entre sus medios afines unos 60 millones de euros. Según arrojan las últimas cuentas publicadas en el Registro Mercantil, el beneficio del grupo de medios liderado por familia Godó se ha desplomado un 54% hasta los 4,4 millones de euros. Tras esta caída se encuentra el pinchazo de su buque insignia La Vanguardia y la mala marcha del canal de televisión que tiene con Mediaset, 8tv.
En concreto, el diario de tirada nacional que se publica en castellano y catalán, ha vuelto a los números rojos (perdió unos 910.000 euros tras ganar 420.000 euros en 2015) y acumula nueve años de caída de ventas. Así, los ingresos de La Vanguardia han descendido un 6,9%, hasta los 98,2 millones de euros. Ese mismo año, el diario recibió 2,24 millones en publicidad institucional del Govern que preside Carles Puigdemont y 761.000 euros en subvenciones al catalán.
El diario, que es la principal fuente de ingresos del grupo Godó, explica este empeoramiento de los resultados por la "incertidumbre", la caída de las ventas y la publicidad en papel, a pesar de su mejora en el entorno online (crece por encima de la media sector). Por su parte, la televisión participada por el grupo catalán y Mediaset perdió en 2016 unos 6,5 millones de euros, en línea con los resultados de 2015. A su vez, la cadena arrastra un patrimonio negativo de 5,12 millones.
En julio de 2016, Grupo Godó acudió a la ampliación de capital de Emissions Digitals de Catalunya, la matriz de 8tv, incrementando su porcentaje de participación en un 5,34% hasta el 65,3%. El aumento de peso en la firma se ha traducido en un alza de las pérdidas que se ha tenido que apuntar a pesar de que éstas han sido similares a las del año pasado. Así, según las cuentas publicadas por el grupo del Conde de Godó, su aventura televisiva le ha pasado una factura del 1,12 millones de euros, mientras que el año pasado se apuntó unas pérdidas de 234.000 euros. La firma participa en la televisión, que según explican ha mejorado su audiencia y ha cambiado su estrategia incrementado la apuesta por la producción propia, a través de Catalunya Comunicació.
La otra cara de la moneda del grupo es su diario Mundo Deportivo. Según la cuentas publicadas, a pesar de que los ingresos han caído un 3,2%, los beneficios del diario deportivo se han disparado, pasando de los 17.419 euros a los 423.900 euros.
A nivel de grupo, los ingresos han caído un 4,8%, hasta los 175 millones de euros, mientras que los costes se han mantenido más o menos estables. En este sentido, el gasto de personal ha sido casi igual al de 2015 (67,8 millones de euros) pese a que la plantilla ha subido un 8,6%, hasta los 1.023 empleados. En esta línea, la retribución del consejo de administración ha sumado 2,3 millones, un 0,4% menos que en 2015.
Por su parte, la compañía propietaria de La Vanguardia y RAC1 ha reducido su deuda un 28%, hasta los 28 millones de euros. A lo largo de 2016 pagó el último plazo de un préstamo sindicado de 44 millones de euros que recibió en 2011 de la banca. La entidad gestora era CaixaBank.
En cuanto a las investigaciones abiertas por la Agencia Tributaria sobre el pago de los impuestos de sociedades e IVA de los ejercicios 2011, 2012 y 2013, el grupo asegura que a mediados del año pasado estaban solo "en proceso de recopilar información".