
La venta de la farmacéutica alemana Stada a los fondos de capital riesgo Bain Capital y Cinven se materializará. Tras una mejora de la oferta económica y el recorte, en dos ocasiones, en el nivel mínimo de aceptación, las firmas de inversión han conseguido que los accionistas del laboratorio germano, especializado en genéricos y medicamentos sin receta, acepten su propuesta de compra.
Stada informó ayer de que la adquisición había concluido con éxito al haberse sobrepasado durante el periodo de aceptación, que concluyó el 16 de agosto, el mínimo del 63 por ciento y de que han recibido la aprobación de todas las autoridades de defensa de la competencia. "Estamos contentos de que se haya aclarado la estructura de propiedad", manifestó ayer el presidente de Stada, Engelbert Coster Tjeenk Willink.
Tanto la dirección como el consejo de supervisión de la farmacéutica habían recomendado a finales de julio a los accionistas que aceptaran la nueva oferta mejorada, después de que hubiera fracasado su primera oferta, porque solo el 65,52 por ciento de los accionistas votaron a favor.
Entonces el presidente del laboratorio alemán declaró que "el consejo ha llegado a la conclusión de que la actual oferta refleja apropiadamente tanto el valor de la empresa como el potencial de crecimiento de Stada", a la vez que subrayó que la fortaleza financiera y la experiencia de los fondos Bain Capital y Cinven, así como el compromiso de estas firmas de impulsar el crecimiento y la rentabilidad de Stada durante los próximos años.
Esta segunda oferta subió hasta 66,25 euros el precio de cada título e incluye el reparto de un dividendo de 0,72 euros, lo que supone un mejora de 0,25 euros por acción.
El nuevo precio implica que los inversores, que actúan a través de la empresa conjunta Nidda Healthcare Holding, valoran la farmacéutica en unos 5.300 millones de euros.
Cinven y Bain habían establecido como condición para la fusión una cuota mínima de aceptación, primero de un 75 por ciento, que luego redujeron a un 67,5 por ciento del capital y finalmente al 63 por ciento. La transmisión de las acciones ofrecidas se realizará antes de la junta general de accionistas del próximo 30 de agosto.
El negocio de los fármacos genéricos protagonizó otras operaciones europeas a lo largo de los últimos meses. Así, la alemana Fresenius adquirió en abril el laboratorio de genéricos norteamericano Akorn por 4.300 millones de dólares, (unos 3.660 millones de euros) además de los biosimilares (medicamentos de origen biológico) de la alemana Merck. La india Aurobindo se convirtió en líder de este segmento de negocio en Portugal al hacerse con Generis Farmacéutica. Los genéricos despiertan el interés de las farmacéuticas dado que es un negocio en crecimiento ante la caducidad de las patentes de los fármacos de marca a los que sustituyen.
Las acciones de Stada empezaron a subir con fuerza a media sesión, tras saberse la culminación de la operación. Sus títulos se encarecieron un 13,18 por ciento al cierre, hasta 72,55 euros.
Otras farmacéuticas, sobre todo las más expuestas al segmento de genéricos, cerraron con pérdidas. La británica Hikma, también afectada por un profit warnig comunicado el día anterior, cerró con un retroceso del 5,97 por ciento, hasta 11,19 libras.
Glaxosmithkline registró un descenso del 1,06 por ciento, para cerrar en 14,90 libras, mientras la cotización de Astra Zeneca se situó en 44,47 libras, tras caer un 0,76 por ciento en la jornada.