
BBVA ha realizado el primer piloto real de transferencias internacionales basado en la nueva tecnología distributed ledger technology (DLT) de la firma californiana Ripple. La iniciativa, que se ha probado usando las infraestructuras de BBVA con dinero real, ha logrado realizar pagos entre España y México en cuestión de segundos.
Hoy, una transferencia entre dos país puede tardar hasta cuatro días en procesarse. Por ello, el uso de estas técnicas disruptivas podría suponer un gran avance para mejorar la experiencia de los clientes en sus operaciones en Latinoamérica.
Pero ¿qué es la DLT? El nombre hace referencia a la tecnología de registros distribuidos que forma parte del sistema de cadena de bloques (blockchain), en la base del funcionamiento de criptomonedas como el bitcóin. En efecto, la solución elaborada con Ripple parte del sistema básico que permite realizar transacciones en esta divisa: un libro mayor (ledger) público en el que todas ellas quedan registradas, y cuya principal virtud es la robustez (léase, la seguridad) del procedimiento. El sistema es descentralizado, y permite que cualquier usuario pueda verificar las transacciones que tienen lugar, y que son siempre públicas.
Más seguro...
Como explica Jesús Fernández-Villaverde, catedrático de Economía en la University of Pennsylvania, el blockchain puede compararse con una torre construida con piezas de Lego: a medida que aumenta la altura, más complicado resulta alterar las piezas colocadas previamente. "Una vez que varios bloques se han añadido a la cadena, es casi imposible computacionalmente cambiar los bloques más antiguos, y estos quedan 'congelados'". Verificar y añadir las operaciones a ese libro mayor requiere resolver algoritmos complejos que, sin embargo, son muy fáciles de comprobar a su vez.
Estas características han hecho de la tecnología de blockchain un procedimiento atractivo para un número creciente de sectores. El de las finanzas era un candidato evidente, y BBVA es uno de los bancos que primero han apostado por ello. "Esta iniciativa es pionera del sector financiero y pone de manifiesto cómo los procesos de pagos pueden mejorarse de manera significativa con tecnologías emergentes, lo que se traducirá en claras ventajas para la transaccionalidad de nuestros clientes", señala Alicia Pertusa, responsable de Transformación Digital en Banca de Inversión de BBVA.
... y más veloz
La velocidad es otro de los logros del proyecto. Los clientes además dispondrán de una información mucho más clara sobre los costes del proceso y podrán conocer en todo momento el estado del pago. Esto es posible gracias a las propiedades criptográficas de estas redes, que permiten el registro inmutable de las operaciones y una mejor trazabilidad. Además, al utilizar un sistema de mensajería y liquidación integrado, los intervinientes en la transacción tienen acceso a toda la información sobre los pagos.
La aplicación, desarrollada con el apoyo de la solución de Ripple, es un ejemplo claro de cómo puede evolucionar el servicio de pagos internacionales de BBVA en el futuro.
"Estamos entusiasmados con que BBVA, uno de los bancos más avanzados del mundo en tecnología, se una a la red de Ripple para transformar los pagos internacionales", dice Marcus Treacher, responsable global de Cuentas Estratégicas de Ripple. "Mientras otros se contentan con experimentar con blockchain, BBVA está trabajando con nosotros para mover dinero real y, con esto, BBVA va a modelar un futuro estándar de nivel de servicio para sus clientes".
BBVA está llevando a cabo distintos pilotos con blockchainpara entender y explorar el potencial de esta tecnología, que considera que puede ser clave dentro de la transformación del sector financiero. El piloto con R3 -el consorcio que agrupa a las principales entidades financieras del mundo para explorar casos de uso de blockchain dentro de las finanzas- sobre préstamos sindicados, anunciado recientemente, es un ejemplo más de la actividad de BBVA en este ámbito.
Además de este proyecto con Ripple, BBVA es miembro del consorcio R3, ya citado, y acaba de incorporarse a la Ethereum Enterprise Alliance y a Hyperledger, dos plataformas alternativas que trabajan con la tecnología de cadena de bloques. Todas estas alianzas pretenden buscar estándares comunes y construir plataformas eficaces y seguras que permitan aprovechar las ventajas del DLT en el mundo corporativo. Igualmente, BBVA es uno de los socios fundadores de la Red Lyra, el primer consorcio multisectorial español fundado para aunar esfuerzos en la creación de una plataforma transversal, de código abierto y neutra basada en blockchain y tecnologías de registros compartidos (DLT).