
BMN ha desvelado el impacto que tendría sobre sus cuentas la anulación de las cláusulas suelo hipotecarias y la devolución de los intereses cobrados de más a los clientes. La entidad nacionalizada limita a 45 millones el coste máximo de las indemnizaciones en el caso de que se aplique la retroactividad total.
Sin embargo, el grupo se muestra optimista sobre la decisión final que adopte el Tribunal de Luxemburgo -previsiblemente en diciembre- después de que el abogado de la Corte de Justicia europea defendiera este verano en un informe mantener la doctrina del Tribunal Supremo español, que fija mayo de 2013 como fecha para extender la devolución por mala comercialización.
En este caso, BMN indica en un documento remitido esta semana a la CNMV que tendría que abonar unos 25 millones. En los últimos años, el banco que preside Carlos Egea ha ido acumulando provisiones para asumir este riesgo, que ascienden a 34,7 millones, y negociando con los afectados el cambio de condiciones para reducir el impacto. En 2015, BMN obtuvo un beneficio neto de 64 millones.
El conjunto de la entidades, según el Banco de España, tendrá que devolver entre 5.000 y 7.600 millones de euros.
La anulación de las cláusulas suelo tendrá un segundo impacto en las cuentas de BMN. Reducirá sus ingresos por intereses en 0,69 millones de euros al mes, con lo que en términos anuales el margen se estrechará en 8,2 millones.
El grupo nacionalizado, que el Gobierno debate subastar en el mercado o fusionarlo con Bankia, se enfrenta a la reclamación reciente de 20,3 millones por parte de la Angencia Tributaria de Andalucía. La Junta le exige este pago en concepto del impuesto de depósitos de 2012 aplicado en la región durante la crisis, que anuló el Gobierno central con la puesta en marcha de una tasa a nivel nacional en 2013. BMN está analizando un recurso.