Intel ha superado las expectativas de sus ingresos y ganancias para el tercer trimestre, con unos beneficios de 3.400 millones de dólares (69 centavos por acción) frente a los 3.100 millones (64 centavos) del mismo periodo del año anterior.
Sin embargo, entre los inversores no ha gustado la reestructuración de cargas que se prevé hasta la segunda mitad de 2017 por valor de 2.300 millones de dólares. Como consecuencia, las acciones de Intel caen un 4% en el 'after-hours' a media hora de conocerse los resultados, mientras que en la jornada bursátil ordinaria cerró con una ganancia del 1,23% hasta los 37,75 dólares por título.
Las ventas del segundo trimestre ascendieron a 15.800 millones de dólares, un 9% más que lo conseguido en el mismo periodo del año anterior. Los expertos auguraban que las ventas se quedarían en 15.600 millones.
Segundo trimestre
En el segundo cuarto del año, Intel logró un beneficio 1.300 millones de dólares, o 27 centavos por acción, frente a los 2.700 millones (55 centavos por acción) obtenidos en el segundo trimestre del año anterior. El beneficio por acción ajustado fue de 59 centavos de dólar frente a los 62 centavos conseguidos en el mismo periodo de 2015.
Por su parte, la facturación del fabricante estadounidense de microprocesadores se situó en los 13.500 millones de dólares entre abril y junio, cifra muy similar a la de 2015, cuando la firma ingresó 13.200 millones, un 3% menos.
