Ropa, bolsos de firma, viajes, hoteles o restaurantes de postín. Varios de los acusados en la causa de las tarjetas black solicitaron en varias ocasiones ampliar el límite de las mismas coincidiendo con el verano y la Navidad, fechas en las que pagaron vuelos o compraron en grandes supermercados.
El dinero de las tarjetas black se quedaba corto para los exdirectivos de Caja Madrid y Bankia. Esta última entidad aportó el lunes una prueba más al proceso judicial que presuntamente demuestra que los acusados pedían continuamente a la entidad aumentar el límite de sus créditos, según reveló la agencia Efe.
Blesa: vuelos y comidas
El propio expresidente de la entidad, Miguel Blesa, pidió aumentar su tarjeta en 24.000 euros entre los meses de abril y mayo también de 2006. Durante ese tiempo, el exbanquero gastó 12.597 euros en una agencia de viajes, pagó varios hoteles y reputados restaurantes. Destaca así también su número dos, Matías Amat, que pidió que el límite de su tarjeta pasara de 40.000 a 60.000 euros en agosto de 2006, y dos años después, en enero de 2008 y coincidiendo con la Navidad, solicitó una ampliación de 35.500 euros. Amat utilizó su tarjeta en agosto de 2006, según el registro de gastos aportado por Bankia, para realizar viajes y comprar ropa.
El rastro de su plástico revela que el exalto cargo de la entidad gastó 11.500 euros en dos vuelos con British Airways, otros 11.100 euros en dos vuelos más con Air France, además del pago de los servicios de agencias de viajes y hoteles, entre ellos el prestigiado Four Season Hotels, establecimiento que aún no ha llegado a España. Matías Amat, además, también gastó ese mismo mes 1.800 euros en un sólo día en ropa para mujer. En enero de 2008 compró un bolso de firma por 375 euros y billetes de avión po 5.600 euros.
El exconsejero Mariano Pérez Claver pidió elevar su límite mensual en 30.000 euros en enero de 2006, fecha en la que compró muebles por 4.571 euros, pagó hoteles y gastó 12.700 euros en una gran superficie comercial. Además, un año después, en 2007, también solicitó un aumento de 9.000 euros.
El exdirector general de Banca Comercial de Caja Madrid, Ramón Ferraz, solicitó en diciembre de 2006 poder desembolsar 1.000 euros diarios. Ese mes, y siempre según la correlación de gastos aportada por Bankia, su desembolso obviamente fue a través de retirada de efectivo en los cajeros. La exconcejala de Madrid, Mercedes de la Merced, ya fallecida, también aparece como una de las exconsejeras que pidió más reclamó a la entidad.
Señalan a Barcoj
Los nuevos correos electrónicos apuntan al exdirector financiero de Caja Madrid y Bankia, Ildefonso Sánchez Barcoj, como máximo responsable de la gestión de los plásticos. La mayor parte de los documentos son emails enviados por las secretarias del exdirectivo -para quien la Fiscalía Anticorrupción pide dos años de prisión y multa de 63.000 euros- a diferentes personas del Departamento de Tarjetas donde se piden operaciones relacionadas con las tarjetas siempre bajo la misma referencia: "por indicación del señor Barcoj".