
El banco, que está contagiando al conjunto del sector, necesita 5.000 millones de capital.
La investigación abierta por las autoridades italianas a la cúpula de Monte dei Paschi di Siena, que afecta directamente a su consejero delegado, sobre una presunta falsedad de las cuentas llega en el peor momento. Las dudas sobre la veracidad de los números presentados por el banco más antiguo del mundo podrían complicar el desarrollo de los planes para que tanto la propia entidad como el conjunto del sector en el país transalpino limpien su balance y se recapitalicen. Monte dei Paschi busca ahora 5.000 millones entre los inversores para reforzar su solvencia después de haber 'suspendido' los test de estrés llevados a cabo por la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por su siglas en inglés), mientras que el Gobierno de Matteo Renzi negocia con Bruselas las condiciones para inyectar dinero público en varios grupos sin que inversores y ahorradores sufran pérdidas.
El saneamiento de la banca transalpina es crucial. En los últimos meses su situación ha contagiado a otros sistemas en Europa. El español ha sido uno de los más afectados, a pesar de que en 2012 realizó con éxito sus tareas gracias a un rescate europeo de 41.000 millones. Es la única, junto a la Italiana, que se ha visto arrastrada y aún no ha conseguido en bolsa superar el nivel de cotización anterior a la victoria del 'Bréxit' en el referéndum celebrado en junio en Reino Unido.
Lo que menos necesita Italia es que se genere más inestabilidad, porque sus entidades tienen que ejecutar sus planes de fortalecimiento y limpieza exprés de los balances (acumulan más de 200.000 millones de créditos morosos, una cifra similar a la que tenían las españolas antes de recibir las ayudas de los socios comunitarios).
Cualquier incertidumbre pasa factura. Se ve en la evolución de las primas de riesgo, que son vitales para conseguir una financiación más barata. La de Italia está por encima de la de España, en 118 puntos frente a los 101. Y la brecha podría aumentar si Rajoy finalmente logra formar Gobierno a principios de septiembre. El jueves, día en que fijó la fecha del debate de su investidura para el 30 de agosto, la prima española bajó del umbral de los 100 puntos, un nivel no conseguido en dieciséis meses.
Cuanto antes se despejen las dudas en Monte dei Paschi, que podría verse obligado a cambiar a su equipo directivo si se confirman las pesquisas y que podría tener que asumir indemnizaciones económicas, antes el sector financiero italiano entrará en una fase de normalización y en mejores condiciones. Con ello, los principales temores de los inversores -unidos a las posibles consecuencias del 'Brexit'- se disiparían por completo y ayudarían a una mayor recuperación de la zona euro.
La investigación también afecta al anterior presidente de la entidad, Alessandro Profumo, que dimitió a mediados del año pasado. Precisamente, las investigaciones comenzaron entonces, aunque hasta ahora no había salido a la luz, debido a las denuncias de varios inversores y asociaciones de consumidores por la venta de derivados. Acusan a la entidad de haber comercializado estos productos con los estados financieros falseados.
De momento, las repercusiones del caso parecen limitadas, pero con contribuyen a una mejor percepción en la confianza en Italia y en su sector financiero, que sigue cayendo en bolsa y contagiando a otros mercados. Monte dei Paschi bajó ayer un 2 por ciento, pero otras entidades del país, como los transalpinos Unicredit, que se desplomó más de un 6 por ciento, o Intesa Sanpaolo, que se derrumbó un 5 por ciento.