Francisco Hernando, el Pocero de Seseña, ya prepara las maletas para iniciar, a primeros de 2010, varias promociones en Guinea Ecuatorial y Angola, en las que, según fuentes cercanas al empresario, "hará un negocio redondo puesto que la financiación no saldrá de su bolsillo sino más bien de la de los dirigentes". Esta afirmación llena de preocupación a algunos ediles de Seseña, temerosos de que pueda dejar su urbanización a medio terminar y con deudas pendientes.
Por un lado, El Pocero, en declaraciones a Onda Cero, aseguró que "la semana que viene me reúno con el emir de Dubai y ya estoy empaquetando todo para irme a Guinea y Angola con personal y materiales españoles". Por otro lado, las reuniones que se celebran en el Ayuntamiento para decidir el desvío del cable de alta tensión que atraviesa la urbanización, dejaron hace ya algunos meses, de contar con la presencia de ONDE 2000, la empresa de Hernando, propietaria mayoritaria del suelo.
Aceleración de las obras
De hecho, pequeños promotores que esperan esa decisión, que provocará una reparcelación, para poder obtener las licencias de construcción, ya han manifestado su "profundo malestar" por la desaparición de ONDE de las reuniones.
Otro factor a tener en cuenta es la última decisión del empresario de contratar a 50 empleados para terminar, definitivamente, los edificios que cuentan con licencia de edificación, la rapidez con la que urbaniza toda la zona y la decisión de despedir a los comerciales. Además, para obtener más licencias tiene que esperar a que las obras del agua, el cable de alta tensión, la vía de servicio y otros accesos e infraestructuras estén finalizadas, a lo que hay que añadir la crítica situación que atraviesa el sector inmobiliario y el hecho de que el empresario ofrezca los primeros pisos construidos a personas que compraron la tercera fase.
Nueva imagen mediática
Aunque El Pocero niega que vaya a abandonar la obra, los hechos apuntan en otra dirección. Lo que está claro, es que si se ha propuesto desaparecer, va a intentar dejar su nombre y su residencial limpio de cualquier duda. Para ello, posee un presupuesto de algo más de cinco millones. El objetivo es el "relanzamiento y cambio de imagen en medios de comunicación".
Actualmente se ha decidido a conceder entrevistas, tras varios años en silencio. Según el proyecto al que ha tenido acceso elEconomista, el "proyecto óptico de campaña", como él mismo lo llama, está pensado para contrarrestar las malas noticias sobre su persona y su residencial y aumentar su credibilidad. En concreto, según el presupuesto para televisiones nacionales tendría 3,5 millones de euros, más de 500.000 euros para televisiones regionales, unos 400.000 para prensa y casi 500.000 para cuñas en radio.