El grupo alemán recorta un 31% su beneficio trimestral, hasta 1.353 millones
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha exigido a Daimler -la matriz de marcas como Mercedes-Benz o Smart- que realice una investigación interna para comprobar cómo certifican las emisiones contaminantes de sus coches. Esto se produce apenas dos meses después de que la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) abriera una investigación preliminar sobre ciertos niveles de emisiones de algunos vehículos de Mercedes-Benz.
Es más, el despacho de abogados Hagens Berman interpuso una demanda a comienzos de este mes, acusando a Daimler de que podría estar usando dispositivos para manipular los test de emisiones.
La compañía aseguró, a través de un comunicado, que cooperará ?plenamente? y que tomará ?todas las medidas necesarias? si descubre ?cualquier tipo de irregularidad?. Además, Daimler aseguró que una política de comunicación ?conservadora? fomenta un diálogo más constructivo con las autoridades de EEUU.
Con todo, no es la única noticia complicada a la que tiene que hacer frente Daimler estos días. Ayer presentó los resultados correspondientes al primer trimestre y los resultados no fueron tan halagüeños como esperaban.
El beneficio neto del grupo alemán se recortó un 31 por ciento, hasta los 1.353 millons de euros, como consecuencia de la caída de ventas del Clase S y del Clase E de Mercedes-Benz como consecuencia del final de su ciclo de vida. A esto hay que añadir también el impacto negativo del tipo de cambio.
Sin embargo, la facturación aumentó un 2 por ciento, hasta 35.047 millones de euros, gracias a la mejora de las divisiones Daimler Trucks, Mercedes-Benz Vans y Daimler Buses.
Por otro lado, el grupo cerró el primer trimestre del año con un volumen mundial de matriculaciones de 683.900 unidades, un 7 por ciento más. Además, la plantilla creció un 1 por ciento en todo el mundo y ya suma unos 285.992 empleados.
Estas noticias no afectaron positivamente al grupo alemán en bolsa, que cerró la jornada bursátil de ayer con una caída del 5,12 por ciento. Esto se traduce en que sus títulos valen 63,25 euros.