
La cadena Starbucks ha anunciado que donará sus comidas, bocadillos y ensaladas sin vender a las personas necesitadas en los EEUU en lugar de tirarlas a la basura.
Durante una reunión con accionistas, la compañía indicó que se unirá al programa nacional Feeding America ("Alimentando a América"), por el que cada noche ofrecerá comidas preparadas no vendidas que aún se pueden consumir.
La decisión afectará a sus 7.600 establecimientos repartidos por el territorio estadounidense durante los cinco próximos años. "En el primer año, Starbucks proporcionará unas cinco millones de comidas a personas y familias que precisen alimentos", aseguró la empresa.
En 2021, el número de comidas podría llegar a las 50 millones de raciones al año. El reto, señala Starbucks es asegurar que las ensaladas, sándwiches y otros alimentos refrigerados todavía se pueden consumir con seguridad incluso si su etiqueta superar las fechas de caducidad.