
El Tribunal de Cuentas detecta graves deficiencias en los contratos promovidos por Defensa que analizó. Resulta inaudito que todos los expedientes escrutados, un total de 55 relativos a 2013 y valorados en casi 300 millones, carezcan de un apartado tan básico como es la justificación de su presupuesto. El Tribunal también reprocha el recurso a la tramitación de urgencia sin aducir razones de peso que respalden la premura.
No es ésta la primera vez que se ponen en evidencia defectos de calado en la contratación del Ministerio; de hecho el PSOE recurrió ante el Constitucional el desembolso de 1.760 millones en 2014 por ausencia de publicidad. Irregularidades como éstas no deben tener cabida en un departamento tan sensible como Defensa.