
La compañía española Gas Natural Fenosa, a través de las distribuidoras Metrogas y GasSur, invertirá 1.100 millones de dólares (una cantidad superior a 1.000 millones de euros) en Chile en los próximos diez años.
Esta operación se enmarca dentro del plan de gasificación del país por el que la española llevará el suministro de gas natural a siete nuevas regiones del país, además de aumentar su uso en las zonas donde ya está presente.
Este plan -que fue presentado ayer por el presidente de la compañía española, Salvador Gabarró, y el consejero delegado de Gas Natural, que a su vez es presidente de la Compañía General de Electricidad (CGE), Rafael Villaseca- consta de varias etapas y la primera consiste en la inversión de 700 millones de dólares (635 millones de euros) en los próximos cinco años en Chile.
Esta iniciativa permitirá, de esta forma, conectar 500.000 hogares nuevos en los cinco años siguientes, beneficiando a dos millones de usuarios de gas.
Las nuevas regiones a las que se proveerá de gas natural en los próximos cinco años son las de Tarapacá, Antofagasta, Atacama, Maule, Araucanía, Los Ríos y Los Lagos, que se suman a la Región Metropolitana y a la de O'Higgins, donde Metrogas ya está operando en la actualidad. En total, serán 34 los municipios beneficiados por este proyecto de gasificación.
En la rueda de prensa posterior a la presentación del plan de gasificación de Chile a la presidenta del país, Michelle Bachelet, Gabarró manifestó que "el lanzamiento de este plan es una muestra concreta de nuestra pública intención de hacer crecer las operaciones en Chile. Tenemos un compromiso con el desarrollo del país y la mejor calidad de vida de los chilenos".
Por su parte, Rafael Villaseca, resaltó que este plan permitirá aumentar el acceso al gas natural a más del 20 por ciento del país, lo que pondrá a Chile al nivel que se registra en otros países de la región y de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Apuesta por el país andino
Gas Natural Fenosa desembarcó en Chile a finales del pasado año con la compra de CGE por 2.550 millones de euros, con lo que reforzaba además su posición de liderazgo en el mercado del gas de América del Sur. A través de esta operación, la compañía presidida por Gabarró se hizo también con el control de las distribuidoras Metrogas -la principal empresa de este tipo en el país andino con cerca de 600.000 clientes- y GasSur.
En total, CGE tiene más de 2,5 millones de clientes y distribuye electricidad al 40% del mercado chileno, incluyendo parte de la capital.