Amazon ha anunciado este martes que contratará a 100.000 trabajadores temporales para dar salida a todas las compras previstas en la próxima campaña navideña, lo que representa un 25% más que en el mismo periodo del año pasado.
Esta contratación supone más que duplicar la plantilla fija del gigante de internet, que se compone de 90.000 personas repartidas por 70 almacenes y centros de distribución de todo Estados Unidos.
Los analistas esperan, de media, que la empresa sea capaz de generar 35.000 millones de dólares en ingresos en el último trimestre del año, un 20% más que en el mismo periodo de 2014.
La compañía presentará el jueves sus resultados del periodo comprendido entre julio y octubre, y los que los inversores esperan con ansiedad conocer cuál fue el impacto del Prime Day, una promoción de un sólo día celebrada en el mes de julio que tuvo tanto éxito que -siempre según Amazon- permitió a la empresa superar el número de ventas registradas en el día fuerte con el que se declara inagurada la temporada de compras navideña: el Black Friday.
Sin dejar de expandirse, la compañía ha extendido su programa de envío en un solo día a 12 ciudades de Estados Unidos, y ha apostado por la diversificación dando el salto a la distribución de comidas de restaurantees en Seattle y Portland, y creando un mercado online para productos fabricados artesanalmente.
