Brasilia, 14 sep (EFECOM).- Brasil puede ahorrar hasta 2020 el equivalente al Producto Interior Bruto (PIB) de Bolivia y Paraguay juntos si adopta medidas de eficiencia energética y fuentes renovables de energía, señaló un estudio divulgado hoy.
El informe, elaborado por la Universidad de Campinas (Unicamp) por encargo del Fondo Mundial de la Naturaleza (WWF-Brasil), muestra que sin construir grandes hidroeléctricas ni más plantas nucleares, Brasil puede mejorar su seguridad energética, generar millones de empleos y reducir los efectos del cambio climático.
El estudio, divulgado en Brasilia, aconseja el uso de más fuentes de energía renovable, como la biomasa, la eólica, la solar y las pequeñas centrales hidroeléctricas, que pueden producir el 20 por ciento de la energía consumida en el país.
"Si se aplica un escenario eléctrico sustentable con medidas de eficiencia energética, en 2020 habrá una reducción del 38 por ciento en la demanda esperada de energía eléctrica", señaló la secretaria general del WWF-Brasil, Denise Hamú.
Según Hamú, en términos prácticos, esa energía corresponde a la generación de 60 plantas nucleares como la de Angra III, cuya construcción se discute en Brasil, o a la de seis hidroeléctricas de Itaipú, la enorme central que el país comparte con Paraguay.
Eso significaría para el país una economía hasta el 2020 de cerca de 33.000 millones de reales (unos 15.350 millones de dólares), lo que equivale al PIB de 2005 de Bolivia y Paraguay juntos, agregó el WWF-Brasil.
"Además de eso, habría una reducción de siete veces en el área que se inundaría con la construcción de grandes hidroeléctricas, lo que disminuiría los impactos sobre la población y la biodiversidad nacional", añadió el estudio.
La aplicación de una política sustentable de energía generaría además ocho millones de puestos de trabajo con la producción de electricidad por medio de fuentes renovables, agregó.
Las fuentes renovables estabilizarían además en los niveles de 2004 las emisiones de dióxido de carbono y de óxido de nitrógeno, principales gases causantes del efecto invernadero.
La falta de planificación en materia energética provocó en 2001 en Brasil un racionamiento que se prolongó durante varios meses y desde entonces el país discute fórmulas para garantizar el normal abastecimiento de electricidad.
"No habrá ninguna seguridad energética real si no existe un medio ambiente estable y seguro, y tal punto es particularmente verdadero cuando se consideran los efectos nefastos de los cambios climáticos", anotó el informe. EFECOM
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