
El gobierno de Macao, meca del juego en China, tiene previsto lanzar un paquete de medidas de austeridad en agosto si a finales de julio los ingresos de los casinos no alcanzan 2.255 millones de dólares.
El jefe del Ejecutivo de Macao, Chui Sai On, así lo anunció este martes, en declaraciones que publica hoy la prensa china, y en las que consideró la línea roja unos ingresos por el juego de 18.000 millones de patacas, la moneda oficial de la excolonia portuguesa, (2.255 millones de dólares, 2.036 millones de euros).
Si la facturación de los casinos no alcanza esa cifra, tal y como apuntan los datos preliminares de los 20 primeros días del mes, el gobierno de la región administrativa especial china se verá obligado a recortar sus gastos a partir del próximo mes, señaló Chui. El gobernante se comprometió a que los recortes en el gasto público no afecten al bienestar social ni a la sanidad.
Los casinos de Macao, la única ciudad de China donde está permitido el juego, afrontan serias dificultades, ya que se han visto afectados por la combinación de la ralentización económica del gigante asiático y la campaña anticorrupción emprendida por el régimen de Xi Jinping.
Chui ha explicado que la economía de la región está atravesando una etapa de ajuste después del rápido progreso experimentado en la pasada década y que está tratando de diversificarse. Con todo, añadió, la situación financiera de Macao es estable y sus reservas fiscales le permiten hacer frente a las fluctuaciones de la economía.