
Telefónica ha asegurado hoy que el acuerdo suscrito con Yoigo fue "procompetitivo" y comercial, dinamizó la competencia en el mercado móvil y benefició al cliente final y considera que la sanción interpuesta por la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC) es "injusta y arbitraria".
Por ello, la compañía ha anunciado que recurrirá en los tribunales la sanción impuesta hoy por el organismo. La CNMC ha impuesto una multa de 6 millones de euros a Telefónica y de 300.000 euros a Yoigo por alcanzar acuerdos que restringen la competencia tras los acuerdos de "roaming" (itinerancia) suscritos entre ambas compañías.
En concreto, el organismo subraya que en 2008 ambas suscribieron un acuerdo de "roaming" nacional por el que Yoigo podía usar la red móvil de Telefónica con las tecnologías 2G, 3G y 4G y que ha propiciado que en la actualidad cerca del 50 % del tráfico de los clientes de Yoigo se haga a través de la red de Telefónica.
Este acuerdo, señala la CNMC, otorga a Telefónica un derecho de veto que impide a Yoigo revender a terceros la capacidad de red de Telefónica y, por ello, obstaculiza que Yoigo pueda prestar servicios mayoristas a operadores móviles virtuales, lo que "supone una restricción de la competencia sin justificación objetiva suficiente".
Además, tras el nuevo acuerdo de "roaming" firmado entre ambas compañías en julio de 2013 por el que Telefónica podía acceder a la red 4G de Yoigo, la CNMC entiende que ello restringe la competencia ya que limita la independencia en cobertura y calidad entre ambas compañías y supone una disminución de la presión competitiva en relación con el uso de las redes 4G.
La CNMC no aprecia razones objetivas que justifiquen este acuerdo entre competidores en zonas donde ambos operadores han desplegado o pueden desplegar sus propias redes.
Asimismo, en julio de 2013, las dos empresas suscribieron un acuerdo por el que Yoigo podía ofrecer a sus clientes productos minoristas de Telefónica, lo que ejerció una presión competitiva en el mercado" y supuso una herramienta de presión frente a Yoigo que restringió su capacidad para planificar y consolidar su estrategia competitiva".