El nuevo Auntamiento de Ada Colau en Barcelona se ha propuesto revisar el funcionamiento de los consorcios hospitalarios en la capital catalana.
Así, ayer el gobierno municipal barcelonés expresó su desacuerdo con la aprobación de los estatutos del Consorcio del Hospital Clínic, ya que considera que abre la puerta a la privatización de servicios. Los nuevos estatutos ya contaban con el visto bueno de la Generalitat de Cataluña.
Pero, ahora, la comisionada de Salud, Gemma Tarafa, alertó en un comunicado de que los estatutos del consorcio dan cobertura legal "a la privatización de servicios de la sanidad pública al contemplar la posibilidad de establecer alianzas con empresas privadas".
Tarafa apostó por "preservar el sistema sanitario público, parando progresivamente la privatización y mercantilización de los servicios públicos de asistencia sanitaria en la ciudad".
La posición del ayuntamiento se conoce después de que el Govern autorizara la creación de un consorcio entre el Servicio Catalán de la Salud (CatSalud) y la Universitat de Barcelona para gestionar el Hospital Clínic, hasta ahora sin una figura jurídica concreta.