La Comisión del Mercado de Valores Mobiliarios (CMVM) lusa impuso multas que suman 4,4 millones de euros a siete imputados en el caso del Banco Privado Portugués (BPP), pequeña entidad extinta en 2010 por falsificación de cuentas y blanqueo de capitales, entre otros delitos.
En un comunicado remitido hoy, el supervisor luso detalló las sanciones económicas aplicadas a cada uno de los imputados, incluido el propio banco -en liquidación- y el expresidente de la entidad, João Rendeiro.
Al BPP le impuso una multa de 1,5 millones de euros, "que se encuentra en suspensión total por un plazo de dos años", informó la CMVM.
La sanción aplicada a Rendeiro asciende al millón de euros, acompañada de la "inhibición de funciones de administración, dirección, jefatura o fiscalización y, en general, de representación" de entidades financieras durante cinco años.
También se inhabilitó durante cinco años a otros cuatro antiguos gestores del banco, que igualmente recibieron sanciones económicas: Paulo Guichard -700.000 euros-; Salvador Fezas Vital -500.000 euros-; Fernando Lopes Lima -200.000 euros-, y Paulo Lopes -400.000 euros-.
Por su parte, Vítor Castanheira, antiguo administrador del banco, fue inhabilitado durante dos años y se le aplicó una multa de 100.000 euros, aunque la sanción está "parcialmente suspendida".
La CMVM informó de que su decisión es definitiva sólo en los casos del BPP y de Castanheira, ya que el resto de imputados recurrieron la sanción.
El luso BPP, especializado en banca privada de inversión y que contaba con clientes en Galicia, se declaró en suspensión de pagos en 2009, pero el Gobierno luso se negó a inyectarle dinero público, lo que lo abocó a la liquidación.