
Durante los primeros tres meses del año se intermediaron en España 2.463 millones de euros en activos inmobiliarios, lo que confirma las tendencias de crecimiento en el sector que se iniciaron el año pasado, según datos de la consultora Cushman & Wakfield (C&W).
El capital extranjero participó en casi la mitad de estas transacciones, que principalmente fueron de activos comerciales (oficinas, retail e industrial). Estos fueron los más demandados, representando cerca de 1.500 millones de inversión en un total de 36 operaciones.
Estas cifras suponen, en tan sólo tres meses, el 35 por ciento de la inversión registrada en el año pasado en España, y un incremento de más del triple en comparación con el primer trimestre del año pasado.
"El 2014 ha sido muy activo en inversión, y como ya habíamos anticipado en diciembre, creemos que este año confirmará la recuperación para el mercado inmobiliario en España", asegura el consejero Delegado de C&W en España, Oriol Barrachina. "El recorrido del país en términos de calidad de nuestros activos, el crecimiento de contratación y los precios relativamente atractivos al compararlos con otros mercados core europeos, hacen que España sea un importante destino de capital con origen en diversas partes del mundo", explica el directivo.
Madrid y Barcelona han registrado un mayor interés por parte de inversores, con un 70 por ciento de los flujos de capital. En la capital española se han llevado a cabo operaciones que han implicado 1.400 millones de euros, mientras que en Barcelona se han alcanzado los 300 millones de euros.