La Comisión Europea ha autorizado este jueves con condiciones a la compañía química Ineos y a la belga Solvay a crear una empresa conjunta de fabricación de plásticos PVC. La autorización está supeditada a que Ineos venda varias fábricas de policloruro de vinilo suspensión (S-PVC) y activos relacionados.
Esta cesión deberá ofrecer al comprador una estructura de producción de S-PVC autónoma capaz de competir con la nueva empresa común, según ha explicado el Ejecutivo comunitario.
Bruselas lanzó una investigación en profundidad el pasado noviembre sobre esta operación al considerar que, tal y como había sido inicialmente notificada, permitiría a la empresa resultante aumentar los precios del S-PVC en el noroeste de Europa y de los productos de lejía en el Benelux.