La petrolera que preside Carlos Pérez de Bricio ha informado a la CNMV de que fusionará sus filiales y actividades petroquímicas en una sola empresa: Cepsa Química. Esta compañía contará con una plantilla de en torno a las 1.500 personas y dispondrá de plantas de fabricación en España, Brasil y Canadá. La información ya fue adelantada por elEconomista el pasado 20 de mayo.
La decisión, que en un principio estaba previsto que se aprobase en la próxima junta general de la petrolera, tiene como objetivo reducir costes y "mejorar la competitividad" de su actividad petroquímica para satisfacer las exigencias del mercado, según explica en el comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La operación se produce tras congelarse el pasado mes de enero la venta de Interquisa a la catalana La Seda y la compra de un 12% de su capital por parte de la petrolera. El freno a la compra se produjo por la fuerte caída en bolsa de la compañía que preside Rafael Español y que hizo que las valoraciones que habían llevado a cabo los bancos de inversión perdieran los ratios financieros con los que trabajaba Cepsa.
La operación, no obstante, no está descartada, sino que sigue en los esquemas de la petrolera.
Reducir costes
Tras esta ruptura, los preparativos de fusión de las químicas se retrasaron, ya que tenía que unirse Interquisa, que en principio se iba a vender.
El objetivo de la empresa es reducir los costes estructurales de mantener empresas distintas como Interquisa, Petresa o Ertisa. Esto supone que habrá puestos de trabajo redundantes en algunas áreas, por lo que se procederá a proponer recolocaciones en el grupo o prejubilaciones. No obstante, los sindicatos de Cepsa consideran que no afectará a un gran número de personas, porque se trata de plantillas reducidas.
El director general de esta nueva división seguirá siendo Fernando Iturrieta, que ocupa al mismo tiempo la presidencia de la patronal de la industria química, Feique.
La petrolera quiere aumentar su presencia en el mercado y reforzar su poder de compra de materias primas en los mercados internacionales. Cepsa se encuentra en un proceso de expansión de esta área. La compañía preveía el año pasado invertir 700 millones de euros para entrar en China y Singapur con nuevas plantas.
La presencia de Total
Cepsa Química también reforzará la posición en el mercado de estas tres empresas. Con plantas en España, Canadá y Brasil, esta filial es líder mundial en la fabricación de alquilbenceno lineal (LAB), materia prima para detergentes, con una capacidad de producción de 560.000 toneladas anuales.
Por otro lado, Total -el mayor accionista de Cepsa con un 48,83 por ciento- dio ayer a conocer su memoria anual. En dicho documento, la petrolera gala valora su participación en la española a 31 de diciembre en 9.277 millones de euros, lo que supone valorar la compañía en 18.998 millones de euros.
Total también recoge los planes de crecimiento en la refinería de Huelva con la inversión en un hidrocrácker de 2,1 millones de toneladas para el año 2010.