La Paz, 28 jul (EFECOM).- El Gobierno de Bolivia desmintió hoy que estudie relevar al presidente de la empresa estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Jorge Alvarado, mientras se investigan unas supuestas irregularidades en la compañía.
El ministro de Hidrocarburos, Andrés Soliz Rada, declaró a radio Erbol que la destitución no ha sido analizada por el Ejecutivo, porque una decisión de tal importancia sólo puede ser considerada por el presidente, Evo Morales, quien se encuentra en Lima.
El mandatario asiste hoy a los actos de posesión de Alan García, como nuevo presidente de Perú.
En medio de versiones periodísticas sobre la posible salida de Alvarado, el partido opositor Unidad Nacional pidió su dimisión porque cree que existió corrupción en un contrato firmado entre la empresa estatal y la firma boliviano-brasileña Iberoamérica.
La Superintendencia de Hidrocarburos denunció ante la Fiscalía las supuestas irregularidades en ese convenio, en el que YPFB compromete la venta de crudo y, a la vez, la compra de gasóleo de Iberoamérica, una compañía vinculada a la brasileña Univen.
Según la entidad, el contrato puede provocar un daño económico inmediato al Estado de dos millones de dólares y de 38,5 millones de dólares en 30 meses, por lucro cesante en ese período.
El ministro Soliz informó de que ha solicitado a la Superintendencia y a YPFB que entreguen la documentación sobre el caso a la Contraloría General de la República porque es la entidad encargada de evaluar los posibles daños al fisco.
"El tema está sujeto a una mayor investigación. Aquí no se trata de apoyos o respaldos, sino de encontrar la verdad", dijo el ministro, quien eludió una respuesta directa a una consulta sobre si apoyaba o no a Alvarado.
El titular de YPFB volvió hoy a criticar a la Superintendencia de una presunta irresponsabilidad en el cálculo para deducir las posibles pérdidas del Estado y la acusó de presentar hasta tres informes contradictorios.
Alvarado también justificó la necesidad de firmar el contrato con Iberoamérica para garantizar la provisión de gasóleo en las ciudades del norte del país porque, según dijo, a diferencia de lo que cree la Superintendencia, sí deja beneficios para el Estado.
"Renunciar sería justificar esa irresponsabilidad de la Superintendencia. Eso no lo voy a hacer", dijo Alvarado a los periodistas.
Por su lado, el director de Comercialización de la Superintendencia, Jorge Téllez, ratificó el rechazo a la solicitud de exportación de petróleo y a la importación de gasóleo, y mantuvo las cifras que sustentan la denuncia ante la Fiscalía. EFECOM
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