El grupo hotelero holandés Host Hotels & Resorts, el fondo de pensiones Stichting Pensionfonds y Jasmine Hotels, filial del fondo GIC Real Estate del Gobierno de Singapur, han comprado el hotel a Hovisa, Deutsche Bank y una decena de inversores, entre ellos, la familia Entrecanales.
Una 'joint venture', integrada por dos sociedades holandesas y una filial del Gobierno de Singapur, cerraron hoy la compra del Hotel Arts de Barcelona por 417 millones de euros, según informó la inmobiliaria Jones Lang LaSalle en un comunicado, que asesoró la operación.
La compra del emblemático inmueble, situado en la Villa Olímpica del litoral de Barcelona, supone la mayor operación inmobiliaria en un único inmueble en la historia de España, según Jones Lang.
El actual propietario del Arts es el grupo Hovisa, participado, entre otros, por Deutsche Bank (10%), Patron Capital(5%) -fondo de inversión de diversas universidades estadounidenses- y una decena de inversores y financieros nacionales, entre los que se encuentran los Entrecanales, la familia que controla el grupo Acciona.
El presidente ejecutivo de Hovisa es Javier Faus, que fue directivo del FC Barcelona con Joan Laporta. El Hotel Arts, de cinco estrellas, tiene 483 habitaciones, piscina, 'spa', gimnasio y cuatro restaurantes. El hotel seguirá siendo gestionado por Ritz Carlton tras la operación.
Por él pujaron Ortega, Koplowitz y los Entrecanales
El grupo japonés Sogo, que impulsó el proyecto, vendió el complejo en noviembre de 2001 tras declararse formalmente en bancarrota, en una subasta en Londres que se adjudicó el Deutsche Bank por una cifra cercana a 285 millones de euros, por delante del fondo participado por Prudential y Goldman Sachs, aliado con el consorcio español integrado por el propietario de Inditex, Amancio Ortega, la empresaria Alicia Koplowitz y el grupo inversor catalán Metrópolis.
En 2004, una decena de inversores españoles, entre ellos la familia Entrecanales y Manuel Cerqueda, compró el 80% del Hotel Arts a Hovisa, la empresa propietaria del establecimiento, con lo que el principal socio hasta entonces, el Deutsche Bank, que poseía el 75% de las acciones, redujo su participación a un 10%.
La venta de parte del complejo a mediados del 2004 arrojó unas plusvalías globales para los vendedores de 120 millones de euros a partir de una valoración del conjunto del complejo en unos 450 millones de euros.