Guerra total en el accionariado de Pescanova. Tres accionistas de la compañía -Damm, Luxempart e Iberfomento- que suman en conjunto el 15,37% del capital rechazaron la presentación de concurso voluntario de la compañía y la revocación de BDO como auditor de la misma.
Fuentes próximas al máximo órgano ejecutivo de la empresa han confirmado además a elEconomista.es que la votación fue mucho más reñida de lo previsto y que hubo en total cinco voctos en contra de estas medidas, frente a siete que dieron su visto bueno.
En el consejo de administración celebrado hasta la madrugada de anoche, Damm, Luxempart e Iberfomento volvieron a insistir en la destitución de Manuel Fernández de Sousa como presidente. "Está tratando de culpar al auditor cuando el responsable de todo lo que está ocurriendo es él. Ha sido el que ha ocultado la deuda y ha hurtado información a los mercados y al consejo", explican las fuentes consultadas.
Los accionistas críticos podrían contar ya con apoyos suficientes para forzar la destitución del primer ejecutivo en la próxima junta de accionistas.
El Consejo de Administración de Pescanova ha acordado este jueves solicitar voluntariamente la declaración de concurso de acreedores dado que no parece posible alcanzar a corto plazo un acuerdo con los acreedores y que su situación financiera presenta riesgo de deterioro. La compañía prepara una demanda contra DBO, que ha auditado sus cuentas durante los últimos diez años.
"El Consejo de Administración, en aras de la preservación de la continuidad empresarial de Pescanova y de la protección de los intereses afectados, ha acordado solicitar voluntariamente ante el juzgado de lo mercantil competente la declaración de concurso de acreedores", según ha anunciado en un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores tras más de trece horas de reunión del Consejo de Administración.
La reunión de este jueves tiene lugar después de que la compañía haya cumplido un mes desde que solicitara el preconcurso de acreedores, con una deuda que puede superar los 2.500 millones de euros, es decir, unos 1.000 millones de euros por encima de lo que figura en el pasivo auditado (1.522 millones de euros al cierre del tercer trimestre de 2012).
Revocación del auditor
El Consejo de Administración de la firma gallega ha acordado igualmente solicitar al juzgado de lo mercantil competente la revocación del auditor de cuentas, BDO Auditores S.L., para la verificación de sus cuentas anuales individuales y consolidadas del ejercicio de 2012.
Pescanova, que ha remitido ya su información financiera a la CNMV, contratará de forma inmediata, según lo aprobado por los miembros del Consejo, un auditor forensic, que elegirá entre las principales firmas de auditoría, para revisar los estados financieros del pasado año.