César R. Díaz
Toronto, 11 abr (EFECOM).- El Pontiac Vibe es ya un vehículo veterano en Norteamérica, pero la profunda remodelación que ha experimentado el modelo actualmente en los concesionarios, y la situación económica en EE.UU., han rejuvenecido sus cualificaciones.
Vibe surgió en el 2002 como una colaboración con la marca japonesa Toyota, que comercializa su versión bajo el nombre de Matrix.
Si en sus inicios los dos modelos contaban con detalles diferenciadores menores, el nuevo Vibe ha conseguido sacudirse muchas de las similitudes con el vehículo del rival.
General Motors vende el Vibe como un "cruzado" CUV pero lo cierto es que se acerca mucho más a un familiar de cinco puertas que a la nueva generación de vehículos que están sustituyendo a los SUV.
La principal novedad del nuevo Vibe es que General Motors le ha añadido una motorización de 2,4 litros que complementa a la clásica de 1,8 litros.
Este último motor es el estándar en el modelo base y proporciona 132 caballos de potencia con su cuatro cilindros. La transmisión puede ser una manual de cinco velocidades o una automática de cuatro.
El nuevo 2,4 litros DOHC desarrolla 158 caballos de potencia y responde a los conductores que consideraban que el Vibe original carecía de la potencia necesaria sobre todo en los modelos con tracción a las cuatro ruedas. Así que este motor es ahora el estándar en los modelos AWD (tracción total) y GT.
El modelo AWD cuenta como estándar con la transmisión automática de cuatro velocidades.
Pero el GT -la versión más deportiva del Vibe- puede estar equipado tanto con la transmisión manual como con una nueva transmisión automática de cinco marchas con control de cambio (DSC) para aumentar las prestaciones y satisfacer a conductores más enérgicos.
En el importante tema del consumo, el motor de 1,8 litros con transmisión manual consigue exprimir 9 litros cada 100 kilómetros (26 millas por galón) en ciudad y 7,3 litros (32 mpg) en carretera mientras que la versión automática sube a 9,4 litros (25 mpg) en ciudad y 7,5 litros (31 mpg) en carretera.
En los coches con el motor de 2,4 litros y transmisión manual el consumo es de 21 millas por galón (11,2 litros por cada 100 kilómetros) y 28 (8,4 litros) en carretera. La transmisión automática de cinco velocidades mantiene la cifra en ciudad pero en carretera lo sube a 29 millas por galón (8,1 litros).
El modelo con tracción total y transmisión automática de cuatro velocidades el consumo es de 11,7 litros por cada 100 kilómetros (20 millas por galón) en ciudad y 9 litros (26 mpg) en carretera.
En el exterior los cambios son evidentes. La intención de los diseñadores ha sido conferir un aspecto más atlético al Vibe, con una trasera elevada y un frontal agresivo.
En la parte frontal, el parabrisas está ahora colocado con un ángulo de ataque más acusado, lo que contribuye al aspecto más deportivo general.
El juego de luces frontales es más angular y con menos líneas curvas que el de los modelos anteriores acentuando aún más la parrilla central formada por dos grandes tomas de aire.
El interior también ha sido radicalmente renovado. Uno de los principales atractivos del nuevo Vibe es su panel de control inspirado en los de coches deportivos, con tres grandes áreas de relojes.
La palanca de cambio mantiene su posición a caballo entre el salpicadero y el suelo del coche, lo que facilita la fluidez entre las dos plazas delanteras.
Uno de los aspectos más utilitarios del nuevo interior es la instalación de una salida de 115 voltios lo que permite conectar directamente aparatos electrónicos, como una computadora portátil, sin necesidad de un convertidor conectado al encendedor.
En la parte trasera, la zona de carga está dotada con un suelo de goma que minimiza el desplazamiento de objetos. Esto se combina con el organizador en compartimentos que es estándar en los modelos dotados con motor de 2,4 litros, lo que facilita en gran manera el transporte de objetos.
En el capítulo de seguridad, el Vibe 2009 viene provisto de fábrica con el sistema de estabilidad electrónica StabiliTrak, sistema de control de presión de neumáticos, airbag frontales, laterales y de cortinilla así como reposacabezas activos.
El modelo básico tiene un precio base de 15.895 dólares mientras que el básico con motor de 2,4 litros sube hasta 16.295 dólares. La versión AWD empieza en 19.495 dólares y el más caro, el GT, asciende a un mínimo de 19.895 dólares. EFECOM
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