El consejero delegado de Axa España, Jean-Paul Rignault, ha avanzado que la compañía va a esperar a que el Gobierno le haga una petición oficial para acudir a la ampliación de capital de la Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb).
En su primer encuentro con los medios de comunicación tras tomar posesión del cargo el pasado mes de enero, Rignault ha reconocido que la decisión de la aseguradora de entrar en diciembre el capital del banco malo no fue una decisión financiera, "sino de compromiso, responsabilidad y solidaridad con la economía española".
Según ha explicado, la consolidación del sistema financiero es algo que interesa y conviene al sector asegurador y a toda la economía del país, pero ha descartado que la decisión de formar parte del capital de la sociedad de gestión de activos fuese financiera, "puesto que las condiciones no se sabían, no hubo casi tiempo para decidir".
