
El actual entorno económico, dominado por la incertidumbre financiera, ha llevado a las empresas más potentes a aplicar fuertes estrategias de desinversión para sanear sus cuentas y equilibrar los balances.
Las grandes compañías españolas necesitan, ahora más que nunca, sanear sus cuentas y hacer caja. Por eso, reducir deuda se ha convertido en el principal objetivo de las empresas de todos los sectores, llevando a cabo fuertes procesos de desinversión para poder equilibrar sus balances.
De hecho, desde el inicio del año el anuncio de planes de negocio basados en este tipo de estrategia ha aumentando notablemente entre los grandes grupos. De momento, contando los planes que están en marcha y los que ya han sido ejecutados, el tijeretazo acumulado en las deudas de las principales empresas de nuestro país supera los 40.000 millones de euros, según estimaciones realizadas por elEconomista sobre una veintena de empresas.
Energía
El sector energético destaca entre el resto por conseguir hasta el momento un mayor recorte en sus pasivos. Por su parte, Iberdrola, apostando por la rotación de activos, vendió en Guatemala su participación del 49 por ciento en Distribuidora Eléctrica Centroamericana (DECAII), el 100 por ciento de Gestión de Empresas Eléctricas (GESA), el 51 por ciento de Generadores Hidroeléctricos (Genhidro) y el 3,12 por ciento de Hidronorte.
El grupo, que prevé reducir en 6.000 millones su deuda para 2014, vendió su participación en la red de gas de la Comunidad Valenciana y ha anunciado la posibilidad de deshacerse de sus activos de gas en EEUU.
Por otro lado, Gas Natural Fenosa acordó en 2011 la venta de las participaciones en sus filiales de Guatemala al fondo de inversión Actis por 244 millones. En el marco de la integración con Unión Fenosa, el grupo ha vendido ciclos combinados en España, así como su red de distribución de gas en Madrid y logró unos ingresos extraordinarios de 1.135 millones con la venta de participaciones en Cepsa, Red Eléctrica, Enagás, Indra e Isagén. La gasista también acordó la venta del 63,8 por ciento de la sociedad colombiana EPSA por 858 millones de euros.
Durante los últimos años Repsol también ha avanzado en su estrategia de desinversiones con la venta en 2010 del 5 por ciento de CLH por un importe de 145 millones. El grupo también vendió el 82 por ciento del almacenamiento de gas natural subterráneo Gaviota por 87 millones de euros y desinvirtió su participación del 25 por ciento en Bahía Bizkaia Gas (BBG) por un importe de 31 millones de euros.
Infraestructuras
OHL cerró a finales de mayo la venta de su filial de medio ambiente, Inima, al mayor fondo de pensiones de Corea GS Engineering & Construction Corporation y Copainima por 231 millones de euros en una operación que le ha reportado una plusvalía neta de 43 millones de euros.
Por otro lado Ferrovial, a través de su filial de aeropuertos, BAA, ha vendido el aeródromo de Edimburgo a la firma Global Infrastructure Partners (GIP) por un importe de unos 988 millones. La última desinversión del grupo ha sido la del aeropuerto de Stansted, en Londres. FCC también ha acometido verias desinversiones dada su abultada deuda, que ronda los 7.000 millones de euros. En Europa, FCC sacrificará activos de Alpine para reducir y refinanciar deuda, de momento la división de construcción industrial, Alpine Energie, es el principal activo con el cartel de venta.
Telecomunicaciones
Telefónica lleva desde principio de año con la máquina de desinversión a pleno rendimiento. Sólo durante octubre, la compañía ha puesto en valor activos por importe de 2.550 millones tras la reciente venta de Atento al fondo de capital riesgo Bain, por un total de 1.039 millones de euros, junto con el inminente estreno en bolsa de Telefónica Deutschland, donde el grupo que preside César Alierta confía ingresar alrededor de 1.500 millones a cambio del 23 por ciento de la filial germana.
A lo largo de este año, el grupo de telecomunicaciones ha reducido su deuda en 12.160 millones a través de diferentes operaciones, generalmente ahorros directos y desinversiones. La ofensiva del año arrancó a finales de febrero, cuando Telefónica vendió el 13,2 por ciento de Hispasat a cambio de 124 millones de euros. En su empeño por recortar el ratio de deuda sobre ebitda de 2,55 veces al deseado 2,35 veces, el grupo saludó la pasada primavera con la venta de 500 torres de telefonía móvil a Abertis, con las que obtuvo 45 millones. El pasado junio inyectó 1.142 millones de euros tras desprenderse del 4,56 por ciento de China Unicom.
Hoteles
La cadena NH Hoteles, ha puesto en venta activos por valor de 250 millones de euros como parte del acuerdo de refinanciación de 804 millones de euros firmado en mayo con las entidades acreedoras.
La compañía espera cerrar la venta de su único hotel en Nueva York, el Jolly Madison Tower, antes de final de año por unos 100 millones.
Por su parte, Meliá Hotels International ha iniciado un plan de desinversión de activos por 100 millones de euros para cumplir este año con la banca. De momento, la cadena ha vendido un hotel en Cancún por 61,2 millones de euros, que ha generado una plusvalía de 26,4 millones de euros, y el Tryp Blanche Fontaine por 12,8 millones de euros.