Esmirna (Turquía), 8 jul (EFECOM).- El sector textil turco considera que la rapidez y la creatividad en el diseño son los elementos fundamentales que permitirán a Europa marcar la diferencia con China en los mercados internacionales.
El presidente de Soktas, una de las mayores empresas turcas del sector, Muharrem Kayhan, afirmó en una reunión con periodistas que "una de las grandes ventajas que tenemos es que somos los más rápidos del mundo" en servir un producto a cualquiera de sus cerca de 400 clientes, entre los que se hallan firmas como Armani, Zara, Hugo Boss, Timberland, Tommy Hilfiger y Banana Republic.
China sólo podría ser competitiva con las empresas turcas del sector si empezara a enviar sus pedidos por avión, en cuyo caso "los costes se dispararían", pero en barco "somos más rápidos", aseguró Kayhan, para quien es necesario que en Europa se deje de ver a Turquía como un proveedor situado más allá de sus fronteras.
Según explicó el presidente de la compañía, que cuenta con unos 1.200 empleados, se da la paradoja de que "en Europa Turquía no es Europa, y en China Turquía es Europa".
Kayhan resaltó además que Turquía ocupa una situación geográfica estratégica muy importante en Europa, que le permite rebajar costes a la hora de proveer los mercados del continente, e incluso otros más lejanos.
Soktas, proveedor de telas de los productos que dichas firmas comercializan en toda Europa, hace llegar a sus clientes "en un plazo de cuatro o cinco semanas cualquier tipo de diseño y cualquier cantidad" de tela, lo que la convierte en una de las grandes respuestas europeas al incremento del textil chino.
Sólo en costes de envíos de muestras de nuevas telas -para las que consume anualmente del orden de 250.000 toneladas de algodón- Soktas invierte 10.000 dólares mensuales en gastos de paquetería urgente.
Kayhan consideró "secundaria" la inversión en maquinaria en la empresa, cuyo volumen de negocio creció de forma sostenida durante los últimos cinco años, y restó igualmente importancia a la devaluación de la lira turca, ya que gran parte de los contratos y gastos se realizan en moneda extranjera.
Al margen de la relevancia del mercado europeo e internacional para el sector textil turco -que tiene alrededor de dos millones de empleados- el presidente de Soktas recordó que también "tenemos un mercado interno floreciente que no podemos descuidar. Los turcos también consumen".
Turquía, con alrededor de 70 millones de habitantes, es una economía que ha crecido una media del 7,5% anual durante los últimos cuatro años y en el que el dato de la inflación, por primera vez en tres décadas, se ha reducido a un único dígito: el 8%, según datos publicados el pasado mes de junio por el Fondo Monetario Internacional.
El Gobierno turco se encuentra ahora inmerso en un largo periodo de negociaciones que podrían desembocar a partir de 2014 en un acuerdo para su adhesión a la Unión Europea.
Dicho acuerdo está supeditado a profundas reformas en todos los terrenos, y a la solución de asuntos tan importantes como la situación actual de Chipre y el pleno respeto a los derechos humanos en Turquía. EFECOM
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