Las acciones de Bankia han perdido la mitad de su valor desde su salida a bolsa, en julio del pasado año, sobre todo debido a las dudas despertadas, tras la dimisión de Rodrigo Rato y la entrada del Estado en su capital.
Este lunes, el valor ha cerrado la sesión con una caída del 8,93% hasta los 1,886 euros, frente a los 3,75 euros con los que empezó a cotizar el 20 de julio de 2011.
La dimisión de Rodrigo Rato como presidente el lunes de la semana pasada ya despertaba las alarmas sobre la situación de la entidad, que se disparaban el miércoles cuando el nuevo presidente, José Ignacio Goirigolzarri, proponía al Estado que nacionalizase Banco Financiero y de Ahorros (BFA), matriz de Bankia.
Así, la semana pasada, la entidad perdió en bolsa un 15,6% de su valor, es decir, que su capitalización se redujo en 766 millones de euros en cinco días de cotización.
El desplome de hoy está más relacionado con las nuevas provisiones exigidas por el Gobierno para los activos inmobiliarios no problemáticos en la reforma financiera aprobada el viernes.
Según la información suministrada ayer, Bankia es la entidad que más dinero tendrá que aportar en provisiones adicionales, 4.722 millones de euros, que se elevan a 4.813 millones al sumar los 91 requeridos a su matriz, BFA.
El FROB aprueba entrar en el capital
El Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ha señalado hoy que ha acordado realizar la conversión de participaciones preferentes en BFA por acciones ordinarias, tras como había solicitado la entidad, lo que supondrá su nacionalización temporal, según informa Reuters.
La conversión de las participaciones, por valor de 4.465 millones de euros, en acciones se llevará a cabo una vez se disponga de la valoración de la entidad para fijar el precio de conversión.
"Esta valoración, que se realizará por expertos independientes, se iniciará de inmediato", ha señalado el FROB, organismo público dependiente del Banco de España.
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