
BAA, grupo británico de aeropuertos participado por Ferrovial, cerró 2011 con unas pérdidas de 191,5 millones de libras (unos 228,2 millones de euros), lo que supone reducir un 40,5% los números rojos contabilizados un año antes, según informó la empresa.
Los ingresos crecieron un 9,9%, hasta 2.280 millones de libras (unos 2.717 millones de euros), mientras que el beneficio bruto de explotación (EBITDA) se elevó un 17,1% y se situó en 1.348 millones de euros.
El consejero delegado del grupo, Colin Matthews, destacó el "fuerte rendimiento operativo" que logró la compañía en 2011, con niveles de tráfico récord y altos estándares de servicio en el aeropuerto de Heathrow. Según informó, el tráfico de pasajeros en sus aeropuertos se elevó el 3,7% en el conjunto del pasado ejercicio, hasta un total de 87,4 millones de personas. Solo Heatrow concentró 69,4 millones de pasajeros, un 5,5% más que en 2010, destacando los crecimientos de EEUU, Alemania, Suiza, Francia y Brasil.
Matthews señaló además que BAA continuó invirtiendo "significativamente" en la mejora de sus aeropuertos durante el año pasado, especialmente en la nueva terminal 2 de Heathrow.
BAA cerró el ejercicio 2011 con una deuda financiera neta de 10.992,2 millones de libras (unos 13.108 millones de euros), lo que implica un aumento del 5,7% en comparación con 2010.