
Tecniberia, la patronal de la ingeniería, atraviesa una importante crisis interna. Según aseguran fuentes consultadas por este periódico, su presidente ejecutivo, José Luis González Vallvé, ha dado un golpe en la mesa y podría dejar la presidencia en la próxima asamblea general si no se resuelven varios puntos que considera críticos.
El presidente de Tecniberia ha lanzado duras críticas contra la gestión de su antiguo director general, Rodolfo Sáenz de Ugarte. Para el presidente, el pago de 40.000 euros en una auditoría y de un finiquito de 90.000 euros resultaban del todo inadecuados.
Críticas al su predecesor
González Vallvé explica que puso en conocimiento de algunos vicepresidentes y de la junta sus discrepancias sobre la gestión y entendía que existía una situación poco admisible. "Ante mi sorpresa lo rechazaron respondiendo que el director general había justificado suficientemente sus actuaciones".
Ante esta situación, denunció los hechos ante "las más altas instancias de empresas asociadas", que, según dice, le dieron la razón. Lo sorprendente, para él, es que se le despidiera con un finiquito de más de 90.000 euros, "sobre el que manifesté mi total desacuerdo y que acarreó una situación financiera muy complicada para Tecniberia". Y eso, sin contar con el hecho de que hubo que encargar una auditoría interna con un coste de otros 40.000 euros, "que no añadió absolutamente nada nuevo".
El presidente de la patronal se muestra muy crítico también con el nuevo modelo que quiere adoptar la patronal y que puede suponer su salida. Según apunta en un informe interno, el nuevo guión a seguir que quieren para Tecniberia los asociados y miembros de la Junta Directiva pasaría, entre otras muchas cuestiones, por disponer de un presidente empresario y no un presidente profesional no ejecutivo, con lo que la función de Vallvé desaparecería. Pero, según el texto, si se eligiera la opción de continuidad tendrían que resolverse previamente una serie de aspectos puesto que "la actual situación además de ser manifiestamente mejorable, entorpece las funciones hasta el punto de replantearme mi continuidad dependiendo de las condiciones", apunta González Vallvé. "Un presidente profesional no ejecutivo puede y debe ser un factor de equilibrio en el reparto de poder en la asociación", sentencia.
Esta patronal, por su parte, sólo aseguró que "a día de hoy González Vallvé sigue siendo nuestro presidente".
8.000 euros en comunicación
Pero ahí no queda la cosa... el presidente de Tecniberia no tiene "pelos en la lengua" a la hora de juzgar con dureza algunas de las actuaciones que se han llevado a cabo. En concreto, explica que en el año 2010 once de las empresas asociadas contrataron a un gabinete de comunicación externo cuyos resultados dice, fueron positivos aunque, esta situación supone que en el verano de 2010 se anulase la contratación con los responsables internos de comunicación.
Pero, lo grave a juicio de González Vallvé es que inmediatamente después "se contrata sin intermediación profesional a un director de comunicación. "El coste anual de la comunicación de Tecniberia asciende a 8.000 euros al mes con resultados escasos". Una cantidad que González Vallvé considera abusiva al tratarse además del hijo de un vicepresidente. "En el mercado se puede conseguir mayor eficacia con un coste inferior a la mitad del actual, y por ello, proponemos rescindir el contrato con los actuales responsables externos de comunicación", sentencia.