El director del Departamento de Análisis de Mercados de Bankinter, Ramón Forcada, ha abogado por la creación de un holding que aglutine los activos inmobiliarios de bancos y cajas con el fin de despejar las dudas de los inversores y mercados respecto a los problemas de solvencia del sistema financiero español.
Forcada ha explicado que este instrumento, participado por las entidades que trasladaran en él sus activos relacionados con el ladrillo, no tendría coste para el contribuyente ni realizaría actividad económica bancaria, por lo que no estaría sujeto a requisitos de solvencia ni liquidez.
Dicho holding, al que Forcada prefiere no llamar "banco malo", permitiría flexibilidad en el provisionamiento de los activos inmobiliarios por parte de las entidades tenedoras, y podría dotarse de recursos a través del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) o del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), planteó.
En su presentación de las perspectivas de la economía mundial, el experto de Bankinter consideró que el problema del sector financiero no radica en el reconocimiento de las pérdidas en balance derivadas de la exposición inmobiliaria, sino en la capacidad de la sociedad para hacerse cargo de los inventarios de vivienda.
En este sentido, recalcó que en la actualidad no hay referencias de precio en el mercado inmobiliario, lo que dificulta especificar una cifra exacta de reconocimiento de pérdidas, mientras que la tasa de paro del 21% impide la reactivación de la demanda. "El problema no son las viviendas, sino el paro", enfatizó.
Un recorte de 30.000 millones
Forcada también ha realizado un análisis de la situación de las cuentas del Estado. Considera que el Gobierno deberá recortar el déficit público en 30.000 millones de euros en 2012 a través de una disminución de los gastos y un incremento de los ingresos.
Este importe descansa sobre el pronóstico de un déficit público de más del 7% del PIB en 2011 y supera holgadamente el compromiso anunciado por el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, durante su discurso de investidura de recortar el déficit público en 16.500 millones el próximo ejercicio.
Entre las palancas para reducir el gasto, Bankinter indica que de los casi 3 millones de funcionarios públicos, 1,1 millones no son propietarios de plaza, entre 370.000 cargos de confianza y 700.000 interinos, lo que da margen para acometer un ajuste.
Impuestos para aumentar los ingresos
Bankinter cita los impuestos como vía para aumentar los ingresos, tanto el IVA, que en España (18%) no alcanza la media del resto de la UE (20%), como los impuestos especiales, que gravan productos con una demanda insensible a los cambios tributarios, y el IRPF, que de manera transitoria podría ampliar la base de recaudación y reducir el límite exento para tributar.
Según las previsiones de la entidad que preside Pedro Guerrero, la economía española registrará tasas de crecimiento negativo en todos los trimestres de 2012, aunque su intensidad dependerá de la capacidad de reacción a la hora de adoptar medidas.
En el escenario central que maneja Bankinter para el conjunto del ejercicio que está a punto de comenzar, la economía española se contraerá un 0,6%, mientras que la hipótesis más negativa contempla una contracción del 1,2%.
A mitad de la 'W'
La economía española describirá un comportamiento de 'W' para salir de la crisis, y ahora nos encontramos en el vértice inferior del segundo pico de la letra, explicó Forcada en su exposición sobre las perspectivas de la economía mundial.
Emprenderemos la recuperación en 2013, con un crecimiento del 1% en el conjunto de la UE y de entre el 6% y el 7% en China, que no obstante, necesita crecer un 8% para evitar problemas sociales. EEUU podría desacoplarse "positivamente" de la tendencia general, y los países emergentes ralentizarán su crecimiento, auguró Forcada.
Los mercados, por su parte, emprenderán la recuperación en 2012, un año antes que la economía, y aunque el Ibex cerrará plano el próximo ejercicio, superará los 9.300 puntos en 2013, mientras que los índices S&P 500 y el Eurostoxx, presentan un potencial de revalorización del 30% el año próximo.