La empresa de capital riesgo Carlyle tiene previsto anunciar en las próximas horas la adquisición del 77% del operador de telecomunicaciones Telecable por un total de 308 millones de euros.
La entidad financiera Liberbank, propietaria del 92% de la cablera asturiana, aceleró ayer por la tarde las conversaciones con la firma estadounidense, dejando a Ono y CVC -también candidatos para la compra- sin una de las piezas más preciadas del mercado español de acceso a Internet de alta velocidad.
Según ha podido saber elEconomista de fuentes conocedoras de la operación, Liberbank conservará el 15% del proveedor de acceso a Internet líder del Principado de Asturias. Gracias a esta inyección de capital, el banco que lidera Cajastur dispondrá de recursos para intentar eludir el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (Frob).
En concreto, el banco necesitaba de 320 millones de euros para esquivar la recapitalización. La entidad no logrará esta cantidad ya que obtendrá unas plusvalías netas, antes de impuestos, próximas a los 275 millones de euros. Liberbank tiene previsto realizar alguna otra desinversión y negocia con el Banco de España computar los resultados del tercer trimestre del ejercicio para evitar el Frob.
La mayor compra del sector
Los detalles de la operación se anunciarán en las próximas horas, puesto que hasta el momento continúan revisándose aspectos de la mayor compra del sector de telecomunicaciones del año en España.
La liquidez de Carlyle resultó decisiva para imponerse a otros operadores que, inicialmente partían con cierta ventaja al atesorar experiencia directa en la gestión de empresas de telecomunicaciones, como era el caso de Ono y CVC. También se quedaron fuera del primer corte Euskaltel, compañía interesada en extender su presencia de telecomunicaciones convergentes fuera del País Vasco.
La operadora asturiana supera los 150.000 clientes en toda la región y su facturación superó los 120 millones de euros en 2010. En la actualidad, la compañía trabaja en la implantación de la fibra óptica en Extremadura.
The Carlyle Group cotizará en bolsa
