
ACS sigue adelante con su plan de desinversiones y ahora se está planteando seguir perdiendo grasa con la venta de otros activos valorados en cerca de 1.000 millones ante una posible necesidad de financiación.
La constructora se ha dado hasta finales de año para cerrar la venta de las renovables, a la vista de que el desarrollo del proceso ha sido más lento de lo esperado. Para ello ha puesto tambien en el disparadero las líneas de transmisión en Latinoamérica, las concesiones chilenas y la desinversión parcial de una autopista en EEUU, tal y como recoge Bankia en uno de sus informes, en el que asegura que la compañía considera estos activos como susceptibles para la venta.
Este plan de desinversiones formaría parte del llamado plan B que le pidió la familia March al presidente de ACS por si llegaban momentos complicados para la banca, tal y como adelantó elEconomista este pasado agosto.
ACS cerró el martes pasado la operación de venta de varios parques eólicos a Gas Natural. Tras las recientes ventas de activos verdes (752 MW eólicos, 99 MW termosolares), la compañía de Florentino Pérez cuenta con 988 MW operativos o en construcción de los cuales 738 MW son eólicos y 249 MW termosolares.
Bankia valora los activos renovables en 2.897 millones y calcula que le podría suponer unos ingresos de entorno a los 700 millones, una cantidad similar a la registrada por la venta de Clece, que sigue sin cerrarse por la falta de financiación. ACS ha logrado ingresar cerca de 1.814,7 millones de euros con la venta de las renovables, pero todavía le quedan estos dos paquetes más por desinvertir.
En su informe, Bankia se suma al paso dado recientemente por UBS y rebaja también el precio objetivo de ACS, de 43,3 a 36,1 euros.
La salida del consejero delegado de Bankia, Francisco Verdú, del consejo de la constructora ha servido también para eliminar incertidumbres, teniendo en cuenta que además controla la participación del 6% en Iberdrola.
Situación de Hochtief
A los problemas para cerrar las desinversiones se suman también las dificultadas que atraviesa Hochtief, a quien se le está atragantando la venta de su filial de aeropuertos tras la retirada de Fraport y RREEF.
La constructora alemana, filial de ACS, ha decidido nombrar un nuevo director financiero: Peter Sassenfeld. Este ejecutivo sustituirá a Burkhard Lohr, uno de los directivos que a comienzos de año anunciaron su salida de la compañía tras la opa que lanzó el grupo español y que dejará su puesto el próximo 18 de octubre.
El director financiero saliente, Burkhard Lohr, anunció en abril su renuncia a sus cargos en Hochtief, al acogerse a la posibilidad que ofrece el grupo de dejar la empresa en caso de que ACS superara el 30% en su capital. Lohr se sumó entonces al consejero delegado de Hochtief, Herbert Lütkestratkötter, que renunció al puesto.
La parte positiva es que la constructora competirá con Acciona y Globalvía, grupo de concesiones de FCC y Caja Madrid, por el contrato de construcción y posterior explotación durante quince años de la segunda línea del metro ligero de Ottawa (Canadá), un proyecto estimado en unos 1.550 millones.
Iberdrola brilla en el Ibex
La mejor noticia es que Iberdrola fue ayer uno de los valores que más se revalorizó. La compañía cerró con un alza del 4,88%, situando su capitalización en 28.071 millones. La empresa se ha situado, con diferencia, por encima de los grandes valores del Ibex 35, ya que Telefónica ha subido un 3,02%, el Santander un 2,53%, Inditex un 3,26%, BBVA un 2,78% y Repsol un 1,20%.