El gigante estadounidense de la distribución Wal-Mart ha puesto la maquinaria en marcha para avanzar en el Viejo Continente, contratando a la consultora Cushman & Wakefield para que le ayude a buscar oportunidades.
Después de varios años testando con desigual éxito diferentes mercados, la compañía ha fijado el sur de Europa como una prioridad para los próximos años y el mercado español tendrá mucho que decir al respecto. Su experiencia hasta ahora se limita a Reino Unido -es propietario de la cadena Asda, tercera cadena del mercado- y Alemania, de dónde salió en 2006 al vender sus tiendas a Metro tras ocho años en pérdidas.
Según fuentes cercanas a la compañía consultadas por este periódico, el gigante se encuentra ahora tras la pista de una operación corporativa que le ayude a crecer principalmente en España, Portugal, Italia y Francia. La pasada semana, el diario británico The Independent ya informaba sobre la reciente creación en Londres de un equipo de trabajo, formado por algo más de cien personas, encargado de buscar estas oportunidades.
Ante la caída de ventas del mercado interno, el grupo de distribución más grande del mundo se ha propuesto retomar la idea de Europa.
Modelos de gestión
Estas mismas fuentes explican a elEconomista que los modelos de gestión que más le gustan a Wal-Mart son el del grupo valenciano Mercadona y el de la italiano Esselunga, con el que ya habría tenido algún contacto. Aunque todavía no tienen claro si lanzar una oferta de compra o buscar alianzas estratégicas, lo cierto es que la unión de estos gigantes del bajo precio daría un vuelco al actual panorama internacional de la distribución.
En la práctica, sin embargo, no parece tan fácil. Primero porque, al menos en el caso valenciano, su presidente y propietario, Juan Roig, no está dispuesto a vender. Y segundo porque el tamaño de las tiendas de Mercadona es sensiblemente inferior a las de Wal-Mart, que necesita en cada caso un mínimo de 4.000 a 5.000 metros cuadrados. Una prueba de la similitud entre las dos empresa radica, por ejemplo, en el eslogan.
El de Wal-Mart es Always low prices y el de Mercadona el mismo en castellano: Siempre precios bajos. Ambos apuestan por la marca blanca a precios competitivos y mantienen el margen gracias a un alto volumen de ventas. Las ventas de Wal-Mart alcanzaron los 72.951 millones de euros en el primer trimestre, un 4,4 por ciento más.
Según las cifras recogidas por Facset, Wal-Mart tiene capacidad de endeudamiento suficiente para acometer compras de cierta relevancia. Aún alcanzado el nivel de deuda de Carrefour, la más endeudada de las compañías de distribución que cotizan, podría hacer frente a un gasto anual cercano a los 8.000 millones de euros. En la actualidad, y debido a su reciente compra en Sudáfrica, cuenta con un pasivo de 44.000 millones de euros.
Además de Estados Unidos, Wal- Mart cuenta con presencia comercial en México, Canadá, Argentina, Brasil, Chile, China, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, India, Japón, Nicaragua y el Reino Unido.