Empresas y finanzas

Merrill Lynch se enfrenta a una demanda de 10.000 millones de sus inversores

Los problemas para Merrill Lynch continúan después de la dimisión de su presidente Stan O'Neal. El banco norteamericano se enfrenta a una demanda civil de instituciones y particulares que podrían reclamarle hasta 10.000 millones de dólares por las pérdidas que han sufrido como consecuencia de la caída de las acciones de esta entidad financiera por sus errores en la compra de títulos afectados en la crisis hipotecaria.

Según informa el diario británico The Times, estos inversores alegan que Merrill Lynch les facilitó información manipulada sobre su nivel de exposición a las inversiones en títulos vinculados a las hipotecas "subprime".

Un mal momento

La demanda coincide con el relevo de Stan O'Neal al frente de Merrill Lynch, tras asumir la responsabilidad por unas pérdidas de 2.200 millones de dólares en el tercer trimestre del año, pese a lo cual recibirá de su compañía una prestación de retiro de más de 160 millones de dólares.

Esta demanda ha sido interpuesta inicialmente en nombre de la Fundación Life Enrichment, una organización no lucrativa con una participación relativamente pequeña en Merrill. Se encarga de ella el bufete Coughlin Stoia Geller Rudman&Robbins, muy conocido en Estados Unidos después de que recuperase 7.200 millones de dólares para las víctimas del fraude de Enron, la firma energética que protagonizó en 2001 la mayor bancarrota de la historia norteamericana.

Los demandantes alegan que quienes compraron acciones de Merrill Lynch entre el 26 de febrero y el 23 de octubre de 2007 lo hicieron engañados por declaraciones "materialmente falsas" de O'Neal y otros directivos del banco en relación con el verdadero valor de la cartera de bonos que la entidad tenía vinculados a hipotecas insolventes.

Darren J. Robbins, de Coughlin Stoia Geller Rudman&Robbins, ha manifestado que hasta el momento 37 instituciones y particulares se han dirigido a ellos para sumarse a la demanda. "Este caso supone una línea divisoria en la crisis hipotecaria y los inversores podrían tener derecho potencialmente a más de 10.000 millones de dólares", explicó.

Por su parte, un portavoz de Merrill Lynch se limitó a señalar que "la demanda no tiene fundamento, nosotros facilitamos nuestra información financiera con exactitud".

Reacción de la SEC

De momento, la Securities and Exchange Commission (SEC), el organismo regulador del mercado bursátil en Estados Unidos, ha abierto una consulta preliminar, que todavía no tiene el carácter de una investigación formal, para determinar precisamente si la información que Merrill Lynch dio a sus inversores fue la adecuada.

La SEC pretende averiguar si los directivos de Merrill Lynch sabían más de lo que contaron a los inversores, una vez que se ha comprobado que las pérdidas que ha debido encajar en sus resultados del tercer trimestre del año son muy superiores a las previamente anunciadas.

En concreto, Merrill Lynch avisó el pasado 5 de octubre de que tendría que dar de baja de sus balances títulos y operaciones fallidas por un valor de 5.000 millones de dólares. Menos de tres semanas después, el 24 de octubre, Merrill Lynch anunciaba que las operaciones en pérdidas ascenderían a 8.400 millones de dólares, lo que le llevó a sufrir unas pérdidas de 2.200 millones en los resultados del tercer trimestre del año, los peores en sus 93 años de historia.

Además, algunos analistas estiman, según The Times, que Merrill Lynch todavía tendrá que reconocer, cuando haga públicos los resultados del cuarto trimestre del año, pérdidas adicionales por unos 4.000 millones de dólares.

WhatsAppFacebookTwitterLinkedinBeloudBluesky