
La Pampa argentina es un escenario de aparente monotonía en el que sólo descollan unos pocos elementos. El gaucho que cabalga en perfecta simbiosis con su montura. La vaca que engorda feliz con el abundante pasto. El tendido eléctrico que conecta esta vastedad con el resto del mundo. Y todos llevan, de una forma u otra, a la vieja estancia.
Ahí, la vida en el campo se conserva como en formol y con todo su encanto. No obstante, muchas se han renovado de arriba a abajo para acoger a la creciente tribu urbana que sueña con una vuelta a los orígenes, aunque sólo sea por unos días. En estos hoteles rurales, además de disfrutar de las comodidades de un establecimiento de lujo -no falta la piscina o el vaso de vino argentino-, se monta a caballo o se sale de caza en compañía de los lugareños, que gustosos introducen al huésped en su modo de vida. Y quizá ahora que el euro se ha puesto por la nubes sea el momento de volar hasta allí. Nunca las estancias argentinas fueron tan confortables. Al menos estas.
1. Estancia Rincón del Socorro
El fundador de la marca de ropa deportiva North Face, Douglas Tompkins, hace tiempo que dejó sus negocios y se dedicó a comprar grandes terrenos en Suramérica para transformarlos en parques naturales. El último lugar donde fijó la vista son los esteros del Iberá, en la frontera con Paraguay y Brasil. En este territorio salpicado de inmensas lagunas trata de desterrar las especies invasoras para preservar lo que queda de autóctono, como el carpincho, un roedor de generosas dimensiones y vida apacible. Esta loable labor se puede ver en directo si se reserva cabaña en la estancia el Rincón del Socorro, donde el empresario californiano pasa el invierno austral y al huésped se le ofrece galopes a caballo por la hacienda, paseos en canoa entre juncos y las deliciosas verduras del huerto. www.rincondelsocorro.com. 160 euros por persona un fin de semana, de mayo a junio.
2. Estancia El Rocío
La pareja formada por Macarena Llambi y Patrice Gravière, ciudadano francés, compraron hace 20 años una hacienda con cinco habitaciones, a cien kilómetros de Buenos Aires, para vivir como los gauchos. Se podría decir que lo consiguieron, pero el gran nivel de confort de la estancia lo pone en duda. Internet llega por wifi, se dan expertas clases de polo y también hay posibilidad de andar en bici, cazar o salir a avistar pájaros, como en el resto de estancias. Otra placentera actividad consiste en pasar las horas en la pileta o piscina, en el salón acompañado de un mate o en la vieja bañera, sumergido en agua caliente. www.estanciaelrocio.com. Habitación doble (tres con camas separadas) desde 310 euros.
3. Estancia Candelaria del Monte
3A sólo diez minutos de El Rocío se encuentra esta estancia perteneciente a Sebastián Goñi desde hace 30 años. Como hotel funciona desde hace tres y se rodea de un inmenso paisaje, una planicie de intenso verde donde crecen eucaliptos dispersos. La casa es otro cantar, pues se abriga con centenarios plataneros, ginko bilobas, casuarinas, olmos y una gran variedad de pinos que impregnan de una deliciosa fragancia sus seis habitaciones. También existe la posibilidad de pasar el día en la piscina, así como de jugar a pádel y, por supuesto, de montar a caballo libremente por la finca. Mucho de lo que se lleva a la boca sale de la propiedad,incluida la exquisita miel. www.candelariadelmonte.com.ar. Habitación doble desde 175 euros.
4. Estancia El Colibrí
Miembros de una familia francesa de hoteleros, los Fenestraz se fueron con sus tres hijos un poco más lejos para dar con el lugar de sus sueños: una hacienda el centro de la provincia de Córdoba, al norte del país. En este Ralais & Chateaux exquisitamente decorado con mobiliario de principios del pasado siglo, además de la actividades de las estancias, se disfruta de un spa con una completa carta de masajes. De sus nueve dormitorios, destaca la suite Colibrí, con una amplia salita, dos terrazas privadas y un baño de época con jacuzzi. El cuidado ambiente campestre se combina con un servicio de primera categoría. www.estanciaelcolibri.com. Habitación doble desde 310 euros.
5.Estancia Villa María
La estancia más cercana a Buenos Aires también es la más particular de todas, pues se levantó en los años veinte como una mansión de estilo entre tudor y normando. Es lo que se conoce como un country en Argentina, con su club de golf y las lujosas casas de fin de semana, muchas ahora en venta. Posee una laguna para practicar deportes a vela, pistas de tenis, cancha de polo y un cuidado jardín, que exige un paseo en calma. Es, sin duda, el lugar ideal para codearse con lo más granado de la sociedad argentina, que siempre gustó de relacionarse en un atmósfera inglesa, aquí palpable en cada esquina. www.estanciavillamaria.com. Habitación doble desde 160 euros.